Luego de una pausa de dos semanas, Dragon Ball Super vuelve con todo.
Dragon Ball Super: llegó el guerrero más fuerte del torneo pero el futuro inmediato de la serie decepciona

Este episodio culminaría lo comenzado en el capítulo 81, en el que Toppo, líder de las Pride Troopers del universo 11, enfrentaría a Gokú, supuesto representante del mal y único responsable por la situación que todos los universos deberán enfrentar. Luego de que Zeno-sama diera el visto bueno al combate, lo inevitable sucede: Toppo y Gokú se enfrentan a muerte (bueno, por lo menos es lo que Toppo cree).
En un principio la batalla es dominada por Toppo, quien sobrepasa con fácilidad el poder de Gokú en Super Saiyan, demostrando, además, impresionante agilidad y velocidad —datos para nada menores teniendo en cuenta su tamaño—.

La violencia por parte de Toppo es tal que con un simple movimiento disloca el hombro de Gokú, y luego de esto, tras tomar desprevenido al Saiyan, lo somete a un agarre que quebraría todos sus huesos. Vermoud y Marcarita, dios y ángel del universo 11, respectivamente, alientan a su luchador, insistiendo en que acabe con su vida; por su parte, Bills, Wiss y Gohan confían en el talento de Gokú, quien decide demostrar todo su poder.

A partir de ese momento, Goku lucharía en fase Super Saiyan Blue, llegando incluso a utilizar el Kaio-ken y lanzando un Kame Hame Ha combinado con Shunkan Idō, algo que nos hace recordar con nostalgia su batalla con Cell. Bills y Wiss creen que el Kame Hame Ha fue demasiado, suponiendo que el ataque habría acabado con la vida de Toppo, pero, para la sorpresa de todos, Toppo permanecía de pie, solo con algunos rasguños. Gokú, excitado por el poder de su rival, decide ir con todo, y Toppo hace lo mismo en nombre de la justicia; aunque, antes de que ambos luchadores colisionaran, la pelea es interrumpida. El Gran Sacerdote explica el porqué de su interrupción y anuncia que se encontrará construyendo la arena de batalla para el torneo que comenzará en 40 horas de la Tierra.
Ahora bien, antes de retirarse, Toppo le brinda un dato importantísimo a Gokú: él no es el más fuerte de su equipo. Jiren, el héroe del universo 11, es mucho más fuerte; y por lo tanto, más poderoso que Gokú (quien, de momento, posee la misma fuerza que Toppo.

Aunque esto era bastante predecible, no podemos negar que es emocionante, ya que Gokú sigue actuando de forma arrogante, incluso luego de pelear con Toppo; lo que solo puede significar una cosa: el Saiyan posee una transformación más y la está ocultando. ¿No crees?
De igual manera, no todo es color de rosas (color feo, me hace recordar a Black): DBS tendrá una saga de relleno, según las sinopsis de los próximos capítulos. Entendámonos, es una saga canónica y Gokú se encargará de encontrar a los 10 más poderosos de su universo; pero utilizará cerca de 4 episodios para hacerlo, demorando demasiado el inicio del torneo... decepcionante, a decir verdad.
Y tú, ¿qué piensas al respecto? ¿Qué te pareció este episodio? ¿Crees que Gokú esconde una nueva transformación? ¿Qué tan emocionado estás por conocer a Jiren? Esperamos tus comentarios.








