Como cada fin de semana, otro capítulo de Dragon Ball Super fue estrenado. Bajo el título « ¡Estalla una batalla a gran velocidad! ¡El frente unido de Goku y Hit!», se marca el regreso de dos importantes elementos del canon de Dragon Ball Super: la transformación Super Saiyan God y Hit, el asesino del universo 6 cuyo poder es comparable al de Gokú.
Dragon Ball Super: Hit vs. Dyspo, la mejor batalla en lo que va del Torneo de Fuerza

En este episodio, Dyspo, el guerrero sónico del universo 11, reta a Hit con el fin de comprobar su poder ante un enemigo que puede quebrar el tiempo. Para ello, y por primera vez en el Torneo de Fuerza, utiliza una técnica de combate que nos recuerda las estrategias usadas en Dragon Ball Z.
«El sonido del cuerpo»
Hit enfrenta directamente a Dyspo con la intención de utilizar su Tokitobashi, pero, al momento de activarlo, recibe un golpe en el rostro que deja desconcertado a todos; el «Salto Temporal» de Hit había sido superado por este individuo parecido a Bills (y a Champa, aunque este lo niega). Tras esto, Hit hace uso de su increíble capacidad estratégica en batalla para descubrir el método utilizado por su enemigo: Dyspo percibe el sonido que el cuerpo de Hit produce instantes antes del Tokitobashi e incrementa su velocidad miles de veces en consecuencia, impidiendo que Hit realice su técnica. No obstante, Hit confía en sus habilidades y sabe que de proseguir el combate lograría superar a su rival; algo que Toppo, líder de los Pride Troopers, también descubriría.
Super Saiyan God al rescate
Kunshi se uniría a la batalla bajo las órdenes de Toppo, y Hit, superado en número, quedaría a merced de Dyspo (quien, anteriormente, casi queda descalificado); pero, antes de que el guerrero sónico diera el golpe final, Gokú irrumpe en escena y salva Hit. Transformado en Super Saiyan God —ya que esta transformación es mucho más rápida que el Super Saiyan y consume menos energía que el Super Saiyan Blue—, Kakaroto se mide con Dyspo para comprobar su auténtica velocidad y se da cuenta por qué Hit había tenido tantos problemas. Aunque su combate no duraría mucho, Dyspo es la presa de Hit y nadie cambiaría eso.
Hit supera sus propios límites (otra vez)
Hit ya se había adaptado a la velocidad de Dyspo; lo que necesitaba ahora era encontrar una forma de superar la técnica que le impedía usar su Tokitobashi. Para ello, imita la posición y sonido producidos por su cuerpo al momento de usar su Tokitobashi provocando a Dyspo y, de esta manera, encontrando una ruta de contraataque. En otras palabras, Dyspo no podrá descifrar si Hit realizará un counterattack o un Tokitobashi; si usa toda su velocidad para contrarrestar el Tokitobashi, será neutralizado, y, si no lo hace, sufrirá el Tokitobashi de Hit en su máximo poder. Dyspo pierde, pero logra huir; sin embargo, Kunshi no correrá con la misma suerte.
Este episodio fue tan frenético como interesante; se sintió como el antiguo Dragon Ball. Además, fuimos capaces de contemplar la proactividad del Gran Sacerdote al agregar una función en la Godpad que permitiría que Zeno-sama vea las batallas de alta velocidad en slow motion.
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