Hagamos como que esto nunca sucedió, ¿si? Pero sucedió y eso es lo más triste. Corrían los años 90 y la industria del cómic estaba en franca decadencia, las ventas eran cada vez más bajas y los inversionistas comenzaban a retirarse paulatinamente de las editoriales.
Cosas para el olvido: la espeluznante edición de personajes de Marvel en traje de baño

Números en rojo = trajes de baño
En función de esto, tanto Marvel como DC idearon todo tipo de estrategias desastrosas para subsanar los números rojos y salir del pozo financiero. Pero de todo el abanico de malas decisiones editoriales, Marvel se llevó el galardón con los especiales de personajes en traje de baño... ugh.


Todos suponemos que la pregunta que debió haberse hecho Ron Perelman en su momento fue: ¿Hay algo que venda más que el sexo? La verdad es que no se le puede recriminar el razonamiento, todos recordamos los 90 por Baywatch y los videos escandalosos de la MTV... pero principalmente por Baywatch.


Bajo esta lógica de mercado es que la miniserie de portadas alternativas Marvel Swimsuit Illustrated ven la luz por primera vez en 1991, y lamentablemente no será la última. Pero si la idea por si misma no fuese lo suficientemente ridícula, el arte gráfico también dejó mucho que desear:

Con un estilo que le sacaría lágrimas hasta al mismo Rob Liefeld los diferentes artistas deambularon con más pena que gloria. Los nombres más recordados son los de Elizabeth Braddock, Tom Smith y los hermanos Hildebrandt.

Ver también: Los peores dibujos de Rob Liefeld (ver para creer)
Cuesta decir que pese a la carencia de estética agradable y bueno gusto, el formato no fue un total fracaso, extendiéndose en ediciones anuales hasta el año 1995. Inclusive otras editoriales como Avatar Press e Image Comics copiaron la idea. En fin...
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