La curiosidad es muerte y la ignorancia te llevará a la tumba. Corre por tu vida durante toda la noche, si quieres, pero salir ileso solo dependerá de las decisiones que tomes. Así que no hagas preguntas, lo paranormal es incomprensible. Simplemente déjate guiar por estos consejos que salvarán tu alma del infierno en caso de que quedes envuelto en las tragedias más comunes durante una película de terror.
Manual de supervivencia: lo que necesitas para salir con vida de una película de terror

Te presentamos el Manual de supervivencia definitivo por si alguna vez quedas atrapado en las absurdas situaciones presentes en un guión de horror.
Capítulo uno: Interacción literaria

No leas libros extraños en voz alta. De hacerlo, asegúrate de pronunciarlos de forma incorrecta. Si encuentras rasguños, dibujos de hogueras y símbolos alquímicos... HUYE. DESTRUYE EL LIBRO. ENTIÉRRALO. NO TE PREGUNTES QUÉ ES, NO QUIERES SABERLO.
Capítulo dos: Comportamiento social

Si saliste a acampar o explorar lugares peligrosos EN PLENA NOCHE, no te separes del grupo. Fuiste en grupo justamente para NO EXPLORAR SOLO. Si tu grupo se divide en parejas, trata de elegir a alguien que corra más lento que tú. Lo comerán primero y tú ganarás tiempo.
Capítulo tres: Indumentaria

Átate los cordones. No uses tacos. No nades en un lago a medianoche…. mejor NO NADES. Mantén tu teléfono cargado. ¡Vístete! Andar semidesnudo por los pasillos de una tenebrosa casa habitada por un asesino sobrenatural solo expone tu cuerpo y provee más opciones para el «acuchillamiento». La cocina no es un lugar seguro… too many cuchillos.
Capítulo cuatro: Telecomunicaciones

No respondas llamadas al teléfono (quien realmente te necesita, te manda un whatsapp). A no ser que sea tu madre, no responderle sería incluso más aterrador que el propio asesino.
Si no conoces a quien te habla, escuchas su respiración, tiene una voz distorsionada y/o solo te hace hablar a ti… corta el teléfono y huye del lugar. Mucho más SI TE DICE QUE ESTÁ DENTRO DE LA CASA.
Capítulo cinco: Carnalidad

Sé lo difícil que es controlar el deseo y la pasión, pero si te encuentras en una cabaña en medio de la nada, rodeada solo por bosque y sed de sangre, EVITA TENER SEXO. Y si cedes ante la tentación, asegúrate de estar abajo; los asesinos siempre atraviesan a quien se encuentra arriba.
Capítulo seis: Ubicación

Si por alguna estúpida razón entraste en la casa embrujada que debías evitar, no explores el sótano, ático o cualquier sitio carente de luz. Si escuchas sonidos proviniendo de esos lugares, NO SON TUS AMIGOS. No preguntes «quién anda ahí»; mucho menos en voz alta.
Si estás acampando y la naturaleza te llama, no vayas a hacer tus necesidades a dos kilómetros de tu carpa. En caso de encontrar un baño, ten cuidado con los espejos —sobre todo cuando cierras la puerta del botiquín—.
Capítulo siete: Espiritualidad

Si te enfrentas a una posesión demoníaca y la persona que está siendo exorcizada vuelve en sí por un momento para pedirte piedad, ¡NO LE HAGAS CASO! Mátalo. Los demonios siempre mienten.
Nunca negocies ni creas de lo que el demonio te muestra. Tú eres más fuerte y es preferible que revele dónde escondes tu colección pornográfica a perder la vida.
Capítulo ocho: Desenlaces

No compruebes el cadáver de un monstruo supuestamente muerto. Nunca digas «está bien, ya todo terminó»... NO TERMINÓ. Terminará cuando llegues a tu casa y saques fecha para terapeuta.
Si alguien te dice «no, no fui mordido por el zombie», córtale el brazo y corre.
Capítulo nueve: Medidas de contingencia

Si la experiencia sobrenatural sucede en tu propia casa, no intentes salir —todos los picaportes estarán trancados por alguna razón—. Tu única alternativa será ir a tu cama y cubrir todo tu cuerpo con las sábanas. Está comprobado que las sábanas poseen propiedades antidemoníacas.
Capítulo diez: Recomendación final

Aléjate lugares como manicomios, casas embrujadas, cabañas en el bosque, hospitales a la noche, hoteles y moteles, orfanatos, cañerías, carreteras en penumbras y cementerios. También evita profesiones y/o actividades como porrista, mariscal de campo, guardia de seguridad y científico especializado en manipulación genética.
Epílogo:

Si subes al auto y no arranca —sin importar las veces que hagas contacto con la llave—, o si encontraste un lugar para esconderte que solo tiene una salida, acepta tu muerte. Levanta tu cabeza, camina hacia tu miedo e intenta abrazar a tu monstruo/asesino; quizá lo único que quería era un poco de atención. En caso contrario, habrás muerto con dignidad.
- Aunque déjame decirte algo, hay cosas más aterradoras: Ellos se comieron a E.T. en una barbacoa y arruinaron mi infancia
Y tú, ¿qué piensas al respecto? ¿Qué harías para sobrevivir de encontrarte inmerso en una película de terror? Esperamos tus comentarios.







