Hillary Clinton es tendencia por decir que NO

La carrera de Hillary Clinton por el ticket demócrata es casi cuestión de tiempo. Con un 49 % ganado dentro de su partido, según las últimas encuestas, tendría que suceder un milagro para que Bernie Sanders o cualquier otro de los aspirantes demócratas gane la nominación como candidato final.

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Clinton no ha tenido una campaña fácil debido al estigma de los sucesos de Benghazi en el 2012. Sus oponentes le acusan de haber manipulado la información de inteligencia para justificar la muerte de cuatro ciudadanos estadounidenses, incluyendo el entonces embajador en Libia John Christopher Stevens.

También ha tenido que lidiar con los ataques relacionados al uso de una cuenta de correo electrónico personal para tratar asuntos oficiales.

En contra de la encarcelación masiva

En medio de de esta manera de obstáculos Clinton a dicho no a fondos provenientes de compañías propietarias de prisiones privadas.

El sistema penitenciario es un negocio millonario en Estados Unidos y de hecho es una de las industrias más florecientes. Las cárceles privadas necesitan tener entre un 80 a un 100% de su capacidad ocupada para recibir los fondos para operar. Esta es la razón por lo que muchos creen que el sistema no funciona. Los correccionales no parece tener mucho interés en corregir los errores de los reos e insertarlos de vuelta a la sociedad. Mientras más presos duermen en sus camas más dinero ellos reciben.

Por eso Clinton ha decidido recientemente desligarse de las jugosas contribuciones provenientes de ese sector. “Cuando estamos lidiando con una crisis de encarcelación en masa no necesitamos incentivos que puedan contribuir -o aparentemente contribuyan- a las encarcelaciones masivas,” dijo la vocera de Clinton Xochitl Hinojosa al respecto.

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Clinton también anunció que el dinero que recibió proveniente de empresas privadas previamente a esta decisión será donado a organizaciones caritativas, aunque no han revelado exactamente cuáles serán.

Esta, su posición en cuanto al aborto, y la comunidad LGBT son las muestras de que Hillary Clinton tiene una agenda que se inclina cada vez más hacia el ala liberal. Quizás no es tan liberal como Bernie Sanders porque tiene mayor conciencia de lo que se puede y no se puede alcanzar en la Casa Blanca.

Esta medida puede ser una cachetada para aquellos que atacan a la candidata demócrata basándose en el incremento en el número de presos durante el mandato presidencial de su esposo Bill Clinton.