Una sola palabra define claramente a este gran tatuador: muerte. Es que la muerte rodea a cada diseño que este artista realiza, uno puede estar en contacto con la podredumbre y la irracionalidad de este personaje con solo ver sus creaciones.
Grandes Tatuadores: Paul Booth


Les presento al segundo en esta lista de los mejores tatuadores de la actualidad: Paul Booth, un excelente y original genio del tatuaje.
Su estilo es bien reconocible: basta con reconocer un leve aroma a muerte y enfermedad, que es casi seguro que el tatuaje sea de este artista. Sus diseños tienen una estética enferma, psicótica, donde predomina el caos y los trastornos mentales.




En sus diseños predominan los cadáveres, esqueletos, cuerpos en descomposición, restos de carne y tripas, una oda digna de Baudelaire en cada uno de los puntos de tinta.
De sus diseños brotan demonios, seres monstruosos, alienígenas... hasta los bebés más tiernos se convierten en morbosas criaturas del infierno en sus manos.




Pero que el "leit motiv" de este tatuador sea la muerte no significa que no pueda hacer otras cosas: sus retratos de personas son de los diseños más realistas que he visto, además de hacer increíbles pinturas en lienzo y unos tremendos y realistas maquillajes.




