5 momentos cotidianos que serían mucho mejor si tuvieras un amigo contigo

No todo es color de rosa. Hay momentos en los que tenemos que hacer lo que toca ( demasiados momentos quizás). Un día típico para la mayoría de nosotros tiene una gran carga de obligaciones y actividades que no están entre nuestras preferidas precisamente. En muchos casos son también tediosas porque se tenemos que hacerlas en horarios un tanto inconvenientes o en total ausencia de compañía.  

¿Pero cómo serían muchas de ellas si tuviéramos la opción de llevar a un amigo con nosotros? Lo más probable es que la historia sería completamente diferente.

Especulemos sobre cómo serían estas 5 momentos cotidianos si tuviéramos un amigo con nosotros.

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1. Cuando estás atascado en el tráfico

Un viaje que supuestamente dura 20 minutos se estira por más de una hora por arte de mágia (o por arte del tráfico más bien). Ni los CDs ni la radio pueden contrarrestar la ansiedad y la desesperación -para no mencionar la impotencia - que comienzan a adueñarse de tu ser.

Sin embargo, si un amigo estuviera dentro del carro todo sería distinto. Después de todo, una hora no es mucho tiempo para una buena conversación con un amigo, ¿verdad?

2. El almuerzo en el trabajo

Esa preciada hora es realmente un respiro en medio de la jornada de trabajo. Pero en muchas ocasiones terminamos comiendo el almuerzo solos, o cuando más acompañados por el teléfono celular. Muchas personas detestan comer a solas por eso tratan de invitar a sus amigos a almorzar durante la semana de trabajo siempre que se puede.

3. Laundry

Esta aplica fundamentalmente para aquellas personas que viven en apartamentos pequeños y tienen que lavar sus ropas en un laundromat. Esta tarea no es nada divertida cuando se hace fuera de casa, por lo que emplear un par de horas todas las semanas en ello resulta muy pesado para muchos.

Podemos atenuarla con el celular y el WiFi pero nada puede sustituir la compañía de un buen amigo.

4. Mirar televisión

Parece absurdo pero no lo es. Ya se que estamos hablando de algo entretenido pero puede ser aún más entretenido, especialmente si la visita incluye unos bocadillos para picar. Entonces estamos hablando de una tertulia.

5. Ir al gimnasio

Si, claro que sabes que es lo más saludable te ayuda a regular el peso, sentirte con más energía, y mucho más. Pero la realidad es que seguir un régimen de ejercicios es una meta difícil, especialmente si estás solo. Hay días que ni tienes el deseo ni la voluntad para hacerlo.

En ese preciso momento un amigo sería el complemento perfecto. Y si él o ella tampoco tiene deseos pues entonces se empujan el uno al otro, o se van a otra parte con menos sentimientos de culpa.

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