Un repaso por el gran enigma de Blade Runner, que sigue siendo discutido por sus creadores

Ante la cercanía del estreno de Blade Runner 2049, la expectativa en torno a la anticipada (y demorada) secuela del clásico de Ridley Scott corre el riesgo de verse reducida a aquel gran enigma planteado en la película original.

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La eterna pregunta, como ya es sabido, refiere a la verdadera naturaleza de Rick Deckard, el personaje interpretado por Harrison Ford: ¿Es humano o replicante?

Es esto lo que ha monopolizado prácticamente la discusión sobre la secuela, y pareciera como si esta nueva película existiera solamente o bien para dar una respuesta definitiva, o bien para persistir en el misterio.

Tal vez así sea, pero en ese caso el director Denis Villeneuve ya ha confirmado que no habrá una respuesta, lo que es una buena noticia, a pesar de las especulaciones que se puedan hacer.

La relación que los fans han tenido con este misterio desde que Blade Runner se convirtió en un clásico de culto y uno de los films más aclamados e influyentes de ciencia ficción, es la más natural y humana frente al enigma: la búsqueda casi obsesiva de una resolución aún sabiendo que nunca será del todo satisfactoria.

La ambigüedad y el misterio siempre es mucho más interesante que su respuesta concreta y definitiva.

Ridley Scott, de hecho, tiene una respuesta definitiva, que ya ha manifestado en varias oportunidades (incluyendo en el Director’s Cut de la película), pero como aseguran algunas teorías de la interpretación, la del director es tan válida como la de cualquier espectador u otros involucrados.

Mientras hayan diferentes opiniones habrá misterio.

La respuesta está en la ausencia de ésta

Imagen Warner Bros. Pictures

La importancia de la naturaleza de Rick Deckard es innegable para la historia y tiene sus significativas implicancias.

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La ambigüedad al respecto es parte de la riqueza temática y filosófica de la historia, y así lo quiso deliberadamente el guionista de Blade Runner (y también de la secuela) Hampton Fancher.

El esquema moral simplista de replicantes malos/ humanos buenos del comienzo de aquella película, que aceptamos como natural tras identificarnos con estos últimos bajo amenaza y ver como máquinas artificiales con oscuras intenciones rebeldes a los primeros, comienza a complejizarse.

Primero con la presencia de no menos oscuras corporaciones y poderes gubernamentales, de los que Rick Deckard no es más que un peón con una misión aceptada a regañadientes (bajo otra amenaza), y luego al conocer a algunos de los replicantes, con sus memorias artificiales implantadas para generar “un colchón emocional” en su inteligencia artificial.

Aunque no son naturales, sus emociones no son menos reales, como lo evidenció, entre otras cosas, el memorable y emotivo discurso de Roy Batty bajo la lluvia, semi-improvisado por el actor Rutger Hauer.

Imagen Warner Bros. Pictures

Si Rick Deckard es un replicante, la esencia de la película es todavía más triste y trágica, porque no sólo no lo sabe, sino que el grado de manipulación y abuso humano es mucho mayor. Ha sido brutalmente engañado. Y con él, nosotros. 

Esta teoría es la que sostiene el director Ridley Scott.

En el Director’s Cut de Blade Runner (una de siete versiones diferentes de la película, que originalmente tuvo muchos cambios implementados por el estudio) se incluye una secuencia en la que Deckard sueña con un unicornio. Más tarde, el oficial Gaff ( Edward James Olmos) le deja en la puerta de su departamento un unicornio de origami. Esto sugiere que las memorias de Deckard son implantadas, ya que Gaff tiene conocimiento de ellas.

Imagen Warner Bros. Pictures

Sin embargo, los que respaldan la teoría de que no es replicante, sugieren que esto no es más que una señal de que tanto humanos como replicantes tienen sueños en común, comparten afinidades e intereses.

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Uno de los famosos defensores de esta última teoría, es Harrison Ford. ¿Quizá simplemente para favorecer la ambigüedad?

De modo que Ridley Scott y Harrison Ford no han logrado ponerse de acuerdo en todos estos años, y el propio Denis Villeneuve ha narrado cómo la discusión sobre el eterno misterio volvió a surgir entre los dos durante la producción de Blade Runner 2049, de la que Scott es productor, y Ford vuelve como protagonista, ahora junto a Ryan Gosling.

Según Villeneuve:

“Fue muy divertido, debo decir, verme en el medio del fuego cruzado entre Harrison y Ridley, discutiendo sobre si Deckard debería ser un replicante o un humano. Como fan de la película original, esa será una cena que no voy a olvidar”

Para NO dar una respuesta definitiva al enigma, llegará Blade Runner 2049, en octubre de 2017.