The Orville: la nueva serie de Seth MacFarlane que promete mucho

El pasado 10 de septiembre salió al aire el episodio piloto de The Orville, una nueva serie de ciencia ficción creada y protagonizada por Seth MacFarlane, la misma mente detrás de las sitcoms animadas Family Guy (1998) y American Dad (2005) y las películas Ted (2012) y A Million Ways to Die in the West (2014).

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The Orville tiene planeada —por ahora— una sola temporada de 13 episodios, por lo que al momento los episodios estrenados han servido para determinar qué clase de enfoque tendrá el programa y qué tanto humor se puede encontrar, si consideramos que su creador se caracteriza por sus obras de comedia.

La expectativa inicial

Tras un primer vistazo al trailer de la serie, lo que seguramente muchos espectadores pensaron fue que The Orville sería una serie que parodiaría a la franquicia Star Trek (1966) pero apelando al estilo de humor por el cual MacFarlane se hizo famoso. Este estilo se basa en referencias a la cultura popular, el uso del doble sentido y la metacomedia (chistes a partir de la noción de que los personajes saben que son creaciones ficticias).

La mera premisa de la serie exuda hilaridad basada en lo incómodo y la cotidianeidad, pero ambientados en un futuro distante. El protagonista,  Ed Mercer ( Seth MacFarlane), es un oficial de la Unión de Planetas que ha perdido su estatus tras sufrir un colapso nervioso a causa de su divorcio. Mercer es sorpresivamente asignado como capitán de la nave que da título al programa para explorar las fronteras de la Unión y cumplir misiones de reconocimiento, rescate y diplomacia. Una vez acomodado en su puesto y preparado para comenzar un nuevo capítulo en su vida, Mercer se entera de que la primera oficial y segunda al mando de The Orville no es otra que su exesposa,  Kelly Grayson ( Adrianne Palicki), lo que provoca que el ambiente en la nave se torne bastante tenso.

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La sorpresa

Imagen FOX

Inesperadamente, el programa no tiene tanta comedia como uno esperaría. Lo cierto es que el humor está presente en la serie y existen varios personajes que están diseñados para cumplir expresamente la función de  comic-relief. Sin embargo, lo que más predomina en The Orville es el drama. Sigue, además, una trama propia que se sostiene de principio a fin y que puede tocar temas muy controversiales e interesantes desde el punto de vista argumental.

Es aquí que la sorpresa puede ser considerada «buena» o «mala» dependiendo únicamente de las preferencias del público, ya que el estilo planteado por la serie —al menos en sus tres primeros episodios— hace que se asemeje mucho al que tenía la serie Star Trek clásica. Sin embargo, apela un poco más a la comedia (pero no demasiado).

El resultado

La serie ya ha recibido críticas principalmente negativas y un rating no demasiado alentador. No obstante, si se analiza el programa no como una sátira, sino como una comedia dramática que plantea un nuevo universo de fantasía y ciencia ficción, entonces hay que reconocer que The Orville no va para nada mal encaminada a volverse una serie de culto si se le da la oportunidad. El show parece sustentarse, al igual que otras creaciones de MacFarlane, en el desarrollo de sus personajes secundarios y deja gradualmente a los protagonistas Mercer y Grayson como meros «guías» dentro de The Orville.

Imagen FOX

Se trata, sin duda, de una propuesta interesante. Una comedia ligera con toques de drama que no necesariamente siempre tendrá un final feliz, pero sí un final que se mantiene en una línea argumental sólida y «creíble» dentro de la realidad planteada en el show. El hecho de que haya innumerables reminiscencias a Star Trek no significa que sea un programa necesariamente apuntado a los seguidores de dicha franquicia, ya que el universo de The Orville es completamente nuevo y pensado para una audiencia nueva, por lo que aún falta mucho por explorar y descubrir.

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