Pasé un excelente fin de semana porque encontré la manera de conjugar dos de mis actividades favoritas: buenos libros y buenas series de TV. Leyendo el libro de Jorge Carrión “ Teleshakespeare” sobre las grandes series de TV, disfruté al recordar aquellas series fantásticas y analicé por me gustaron o por que no. Luego busque saber un poco mas sobre el autor y aquí escuché una entrevista de él. Es el primer libro que se edita en español sobre el fenómeno de la series de TV.
Teleshakespeare: Guía de la buena TV
Este libro es por un lado una guía, o compendio de aquellos excelentes argumentos que todos recordamos como Los Soprano, Six Feet Under o Rome, pasando por Dexter, Lost o The Wire. También incluye información sobre otras no tan conocidas pero que me dejaron con inquietud por verlas. Por otro lado este libro es también una reflexión general sobre este fenómeno mediático en que se han convertido las series de TV, el uso de internet por parte de las producciones y de la misma audiencia que hace que ver una buena serie de TV haya dejado de ser solo el acto de sentarse un miércoles en la noche a mirarla. Ahora la experiencia es más completa.
La masificación y los fenómenos sociológicos que trae consigo ver una serie y compartir con gente que al igual que tu la disfruta, hace que ver TV se convierta en algo realmente positivo y hasta desafiante. Pero esto no hubiera sucedido si no hubiesen aparecido desde el año 2000 en adelante tantas series de excelente calidad. Un ejemplo de esto fue por ejemplo Lost. No sólo eran apasionantes sus personajes, sino todo lo que rodeaba la serie. Cuanta gente no fue corriendo a leer un clásico de la literatura, o hasta un best seller como por Alicia en el País de la maravillas de Carroll, o Los hermanos Karamazov de Doivtoieski o alguno de Stephen King, solo porque era algo que había aparecido en la trama. Sin mencionar foros, paginas, blogs y todo lo eso generó.
Recomiendo ampliamente este libro sobre la buena TV para entender como Shakespeare fue en su momento reflejo de una era, justo como lo son ahora las buenas series de TV.
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