Los canales más tradicionales de la televisión estadounidense han quedado bastante relegados en la producción de series respecto a las cadenas de cable y los nuevos servicios web como Netflix y Amazon, así que para ponerse a tiro han apostado a la estrategia más efectiva y segura: explotar la nostalgia del público.
La serie de Cruel Intentions cancelada por NBC, pero todavía no está muerta

Casi todas las series nuevas más importantes de los canales de aire estadounidense buscan revivir el viejo éxito de una serie o una película ( Lethal Weapon, MacGyver, The Exorcist, Training Day, 24: Legacy).
Los fines de los 90 es una época preciada para los millennials que hoy comienzan a hacerse adultos y forman el grueso del público al que aspiran cautivar las nuevas series.
Y nada dice tanto fines de los 90 como Cruel Intentions (1999) o Juegos sexuales, el drama adolescente protagonizado por las, en aquel entonces, incipientes estrellas, Ryan Phillippe, Sarah Michelle Gellar, Selma Blair y Reese Witherspoon.
NBC confirmó el año pasado la adaptación televisiva de Cruel Intentions, y produjo un piloto que trajo de regreso al menos a una de las estrellas originales: Sarah Michelle Gellar en el papel de la fría y desalmada Kathryn Merteuil.

Ahora, NBC ha decidido que no seguirá adelante con la serie. Lo que sugiere que tal vez el resultado de la adaptación no es todo lo genial que todo el mundo suponía que sería (!). Según reporta Variety, sin embargo, NBC canceló la serie por no encontrar el lugar adecuado para ella en su grilla de programación, habiendo confirmado ya la producción de otras nuevas series como Emerald City y la basada en el Universo DC Powerless, y teniendo otras series de acción y fantasía que no encajarían junto a este drama adolescente.
La serie fue producida por Sony Pictures que, sin embargo, no se ha resignado tras la cancelación en NBC, y busca ubicar Cruel Intentions en otra cadena, ya que consideran que el proyecto es muy bueno.
Cruel Intentions, una adaptación libre y moderna de la famosa novela epistolar Las relaciones peligrosas (que Stephen Frears ya llevó al cine con una versión más tradicional en la gran película Dangerous Liaisons de 1988) fue una producción independiente de relativamente bajo presupuesto ($10 millones) que se convirtió en un gran éxito de taquilla, recaudando más de $75 millones.
Eso inspiró dos secuelas olvidables, y un recorrido habitual en los canales de cable que la convirtieron en algo así como una pequeña película de culto.







