9 películas que impactaron a Nicolas Cage y cambiaron su vida para siempre

«Tenía una television (sin sonido) y miré Once Upon a Time in the West. Me maravillé por el poder en la quietud y el silencio de Charles Bronson como Armónica (…) El enfrentamiento entre Henry Fonda, quien es excelente como chico malo, y Bronson, es uno de los momentos más poderosos que he experimentado en el cine».

«Le he tomado prestado al personaje de Buddy Love un millón de veces, tanto que he tenido directores que me dicen que necesito material nuevo».

«East of Eden fue la película que realmente me metió el gusanito de convertirme actor de películas, todo por la interpretación de James Dean cuando tiene ese colapso nervioso intentando obtener el dinero para Raymond Massey, quien interpreta a su padre».

«[Una película] muy fantasiosa, que te transporta y es misteriosa. La interpretación de Jean Marais como la bestia es maravillosa. Quería tener ese sonido en mi voz cuando hice Moonstruck y Norman Jewinson se molestó mucho conmigo y perdí la paciencia. Casi me echan de la película».

«La naranja mecánica fue como la película definitiva para cualquier adolescente. Vi la interpretación de Malcolm McDowell y tuvo un gran impacto en mí, tanto que puse pegamento en las pestañas de mi ojo para ir a la escuela con una pestaña. Mi padre realmente perdió la paciencia con eso».

«La bruja siempre me persiguió, la bruja verde, la Bruja Malvada del Oeste».

«La vi cuando era un niño y claro, me rompió el corazón. Me sentí tan mal por el niño de la película, y se convirtió en doctor».

«Nunca vi nada parecido a Bruce Lee, y esa película cambió mi vida porque me hizo creer que un hombre de veras puede hacer esas cosas físicamente extraordinarias, y fue un gran actor. [...] tuvo un gran impacto en algunas decisiones que tomé como intérprete [...] Robé las expresiones faciales de Bruce Lee cuando le rompe el cuello a ese sujeto y la cámara pasa directo a sus ojos, con esa mirada feroz, de ojos bien abiertos».

«Nunca vi nada parecido a Bruce Lee, y esa película cambió mi vida porque me hizo creer que un hombre de veras puede hacer esas cosas físicamente extraordinarias, y fue un gran actor. [...] tuvo un gran impacto en algunas decisiones que tomé como intérprete [...] Robé las expresiones faciales de Bruce Lee cuando le rompe el cuello a ese sujeto y la cámara pasa directo a sus ojos, con esa mirada feroz, de ojos bien abiertos».