Te sorprenderás cuando veas cómo cortar y pelar una sandía

La sandía es una fruta muy rica pero difícil de maniobrar, su tamaño no es lo que yo llamaría “de bolsillo” y a veces se dificulta muchísimo obtener porciones parejas sin ensuciar toda la mesa de la cocina. Por eso, te quiero enseñar alguno secretos sobre cómo pelar y cortar una sandia que te parecerán muy fáciles y te harán exclamar “¿Por qué nadie me lo había dicho antes?”.

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Método #1

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Lava muy bien la sandía.
Con un cuchillo muy afilado, corta cuidadosamente la parte superior y la inferior de la fruta. 
Da vuelta la sandía y cortala en forma longitudinal de lado a lado.
Pon ambas mitades sobre la mesa con la cáscara hacia abajo.
Corta por la mitad cada una de ellas y vuelve a repetir la operación hasta que hayas obtenido 4 secciones de cada mitad.
Con un cuchillo con mucho filo, separa la cáscara de la pulpa. 
Finalmente corta cada trozo de pulpa en pedazos más pequeños y sirve.
Este método te servirá también para el melón, la piña y otras frutas de gran tamaño. 

Te quiero invitar a que visites: Los mejores tragos con sandía

Método #2

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Otra forma práctica de cortar sandía es por medio de la realización de cuñas antes de rebanarla. 

Encuentra el centro de la sandía y corta dos mitades lo más parecidas posibles.
Corta cada trozo de sandía por la mitad
Toma una de esas mitades y rebánalas en porciones finas (te tiene que quedar como si fuera un trozo de pizza)
Sírvelas con cáscara o quítasela por completo. 

Si no quieres hacer rebanadas pequeñas, toma la mitad de la sandía, ponla en una superficie firme con la cáscara hacia arriba y finalmente corta las rebanadas.

Método #3

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Este método es el que a mi más me gusta.
Corta la sandía en rodajas.
A continuación, toma cada una de las rodajas y corta la pulpa en cuadraditos o utiliza un cortante de la forma que tu quieras. Yo tengo uno en forma de mariposa y quedan muy bonitos los trozos de sandía cortados de esta manera. 

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¿Quieres probar una receta increíble con sandía? Corta la pulpa de una sandía y mézclala con helado de vainilla. Pon todo en la licuadora y tendrás un trago helado refrescante y delicioso. Se calcula que la mezcla debe ser de una parte de helado de vainilla por dos partes de sandía. Obviamente eso depende del gusto de cada persona. 

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No dudes en poner en práctica estos métodos para cortar una sandía, pues son muy fáciles y lo mejor de todo es que evitarás el desperdicio de la pulpa de la fruta que siempre queda adherida a la cáscara y nadie la come. 

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