Bienvenido al fondo. Aquí llegamos quienes decidimos que ya fue suficiente: suficiente estrés, suficiente amargura y resentimiento, suficientes problemas, suficiente dolor, suficientes lágrimas y corazones rotos. Estamos quienes decidimos romper con lo conocido y aventurarnos a una vida completamente nueva.
A este lugar llegamos muchos: los que rompen una larga relación amorosa, los que abandonan o son echados de un trabajo sin otro a la vista, los que caen en bancarrota y los que se emigran. A esto se le llama “empezar de cero”, y aunque es un lugar que parece oscuro, solo tienes que abrir las ventanas para que entre un poco de luz. Sigue estos consejos y verás cómo te reconstruyes más fuerte que nunca.
Sé paciente
¿Paciente? ¡Yo lo que busco son soluciones!
Sí, te entiendo, pero empezar una nueva vida implica tener calma. Necesitas fuerza interior, coraje, amor propio, resiliencia, fe y confianza en ti mismo. Todo esto toma tiempo en desarrollarse, así que tienes que aprender a ser paciente y gentil contigo mismo. Perdónate. Aprende del pasado y aprende las lecciones que te dio.
Haz pequeñas cosas que te den felicidad
Un paso importante para empezar tu nueva vida es cultivar hábitos y rituales beneficiosos para ti. Medita, ejercítate, sal y llena tus pulmones de aire fresco.
Parece una tontería, pero estos cambios mínimos hacen la diferencia en la manera en la que ves las cosas y te ayudan a recomponer tu alma.
No te quedes soñando
Soñar es lindo. Compartir tus sueños es aún mejor, pero de nada sirve si no activas tus pensamientos y deseos y los haces realidad.
Haz todo aquello que tienes que hacer para llegar a donde tienes que llegar. Lee los libros que necesitas, contacta a la gente que debes contactar, estudia lo que debas estudiar... Organízate y ¡muévete!
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Abre tus brazos a los cambios
Salir de la zona de confort no es sencillo. Pero debes recordar que vivir implica un cambio constante y necesario para renovarte a ti mismo. Ábrele los brazos y acepta los cambios como algo que le traerá novedad y emoción a tu vida.
Busca apoyo en tus seres queridos
A veces los problemas parecen sobrecogerte. En esos momentos en los que te sientes en un callejón sin salida, acude a tus verdaderos amigos y familiares. Estos te ayudarán a entender qué tiene solución y qué no, qué es realmente importante y te brindarán su apoyo incondicional si lo que necesitas es un hombro en el que llorar.
Ve paso a paso
Como bien dicen por allí “Roma no se construyó en un día”. Arma tu plan y celebra cada paso logrado. Date una palmada reconociendo que avanzaste un paso más hacia tu meta final.
Date el permiso de fallar
Estás creando tu nueva vida, sí, pero ¿quién dijo que todo será perfecto? Fallar está permitido, te ayuda a crecer y a comprender tus errores. ¿Fallaste? No es el fin de mundo. ¡No dejes de intentar! Sigue estos sencillos tips y recupera tu vida. Recuerda, ¡no estás solo!
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