Desde el anuncio oficial de la participación de Gal Gadot en la secuela de la película Man of Steel, en la que encarnará a Wonder Woman, los fans de todo el mundo han puesto el grito en el cielo. Peor aun cuando comenzaron los rumores de que el contrato con Warner Bros. es por tres filmes.

Sin dudas que la pausa que decidió realizar Justin Timberlake en su carrera musical para dedicarse a la actuación, le ha dado grandes resultados.

El género de vampiros se ha estado extinguiendo recientemente, con sólo un par de películas exclusivamente de terror (como, por ejemplo, Let the Right One In), y la mayoría centrándose en historias de amor (la Saga Crepúsculo) o acción infinita que a más de uno le ha costado parte de su coeficiente intelectual (Underworld).

Increíblemente, Hollywood siempre encontrará una manera de explotar los cuentos más tradicionales, incluyendo los de hadas, mediante adaptaciones cada vez más bizarras. Este factor aumenta en demasía si consideramos la posibilidad de que haya secuelas, y hasta una franquicia en base a adaptaciones horripilantes. Esta era la idea que tenía Warner Bros. Pictures con Jack el Caza Gigantes, pero esa oportunidad les pasó por encima y se le dio a Paramount Pictures, cuya Hansel y Gretel: Cazadores de Brujas tendrá una secuela.

Hace ya dos años más o menos que culminó el rodaje del film Hansel y Gretel: Cazadores de Brujas, protagonizado por Jeremy Renner y Gemma Arterton y dirigido por Tommy Wirkola (no muy conocido en el rubro, excepto por el film de zombies nazis Dead Snow).

Sorprendiendo a los fanáticos de la primera parte, esta semana fue anunciado que la actriz Rosamund Pike se encuentra en negociaciones con Warner Bros. y Legendary Pictures para unirse al reparto de Clash of the Titans 2.