Luego de tres días sin saber nada de él, la familia de Fausto Reyes, un reconocido empresario de Republica Dominicana, denunció formalmente su desaparición ante las autoridades. Tras varios interrogatorios a Edwin Holguín, su mejor amigo, descubrieron que el hombre desaparecido había sido asesinado. De acuerdo con el reporte oficial, Holguín amordazó, asesinó y trasladó en una maleta el cadáver, para luego tratar de enterrarlo debajo de una piscina que ordenó construir en su casa.