Eulalia González, de 38 años y madre de cuatro hijos, fue baleada en la cabeza por el exnovio de su hija mayor tras confrontarlo en su casa en Homestead, Florida. Tras ser arrestado por la policía, el menor de 16 años confesó el crimen y aseguró que fue a la vivienda con la intención de matar a uno de los familiares de su exnovia por haber terminado la relación.
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