Camilo Sánchez y María Camila Ospitia fueron asesinados en Bogotá, Colombia, por presuntos miembros de una banda criminal. Con mucho esfuerzo, las víctimas habían construido un colectivo cultural para alejar a los jóvenes de la delincuencia y el consumo de drogas. Su trabajo comunitario habría sido la razón por la que los delincuentes decidieron acabar con sus vidas. Mira también: Hispano muere tras recibir varios disparos en una pelea: un policía lo encontró tirado en la calle.