Una explosión causada por fuegos artificiales, usados durante la celebración del Año Nuevo, dejó más de cien muertos y más de 380 heridos, incluyendo la destrucción de un templo.
Una explosión causada por fuegos artificiales, usados durante la celebración del Año Nuevo, dejó más de cien muertos y más de 380 heridos, incluyendo la destrucción de un templo.