Las lágrimas de dolor de niños en Puerto Rico por las pérdidas que dejó el huracán María
Guillermo Ceberino y Alana Polanco, quienes perdieron sus casas, relatan cómo se sienten tras el paso del fenómeno meteorológico. En la isla funcionan 1,113 escuelas públicas a las que asisten 350,000 menores; de estas han sido evaluadas 400. Religiosas salesianas abrieron una institución en San Juan para dar refugio a los infantes durante el día y ayudarlos con el proceso de sanación.
Las lágrimas de dolor de niños en Puerto Rico por las pérdidas que dejó el huracán María
Guillermo Ceberino y Alana Polanco, quienes perdieron sus casas, relatan cómo se sienten tras el paso del fenómeno meteorológico. En la isla funcionan 1,113 escuelas públicas a las que asisten 350,000 menores; de estas han sido evaluadas 400. Religiosas salesianas abrieron una institución en San Juan para dar refugio a los infantes durante el día y ayudarlos con el proceso de sanación.