“Somos elementos del ejército mexicano”, estas fueron las primeras palabras que escuchó Joseph Constantine, el estadounidense que fue raptado de su casa en Quintana Roo el pasado 6 de febrero. Según las autoridades, el hombre fue encontrado en Limones muy desconcertado y con sus manos y pies atados. Los delincuentes exigían cerca de $11,000 por su liberación. Te recomendamos ver
Un menor de 15 años roba una tienda, le dispara a una turista e intenta huir por la vías del tren en Nueva York.