Los inmigrantes fueron vistos y captados en video saliendo del vehículo que se detuvo en frente de una oficina municipal en Pearsall, Texas. Según las autoridades, muchos de ellos necesitaron agua y atención médica urgente, ya que las temperaturas que pudieron alcanzar en el camión fueron altamente peligrosas. La compañía cuyo logo aparecía en la carrocería aseguró no tener nada que ver con lo ocurrido con este caso de tráfico humano.
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