Lucía Anaya es parte de las más de 700 personas que han dejado sus hogares desde inicios de junio en Apatzingán, Michoacán, debido a las seguidas balaceras y la violencia del crimen organizado. "Salí de mi casa solo con la ropa y los papeles", contó. En total, unas 200 familias han llegado hasta una parroquia donde se instaló un centro de acopio. Entretanto, autoridades anunciaron que instalarán una base de operaciones para que puedan regresar a sus hogares.
Más información en Univision Noticias.