Mantener una casa limpia es muy importante, sobre todo porque no queremos tener una colonia de gérmenes y bacterias que puedan dañar nuestra salud y la de nuestra familia.
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Y aunque parezca difícil de creer, existen algunos consejos que puedes tomar en cuenta para evitar que tu hogar se ensucie más rápido y ahorrarte bastante tiempo.
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Sacudir el polvo. Probablemente comienzas limpiando los muebles sacudiendo el polvo para terminar fregando los pisos; sin embargo, es mucho mejor que primero barras o pases la aspiradora, ya que si lo haces al revés, quizá el polvo acabe nuevamente en los muebles y tengas que volver a sacudir.
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Alfombras. Si no estamos acostumbradas a quitarnos los zapatos al pisar una alfombra, tienes que estar consciente de que tanto alfombras como tapetes tienden a acumular infinidad de ácaros y suciedad que viene del exterior, así que al menos una vez al mes debes lavarlos.
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Superficies de la cocina. Al tratarse de un espacio en donde cocinamos y guardamos los alimentos que ingerimos, es fundamental que luzca limpia e impecable todo el tiempo, así que todas aquellas superficies como encimeras, deben ser limpiadas y desinfectadas después de cada uso y siempre.
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Rincones ocultos. A veces sólo limpiamos lo que está a nuestra vista y alcance, y nos olvidamos de aquellas zonas que pasan desapercibidas, como detrás de los sillones, debajo de la nevera, etc. ¡No te olvides de ellas!
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Sofás. La estancia es uno de los lugares en donde solemos, tal vez, pasar más tiempo, ya sea para ver televisión o para simplemente descansar, por lo que los sillones deben también tener limpieza de vez en cuando. Puedes aspirarlos o sacudirlos con un trapo y eliminar de esta manera el polvo acumulado.
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