Inundaciones repentinas y vientos huracanados: lo que se espera de la tormenta que azotará la Bahía

El Área de la Bahía se prepara para recibir la más fuerte de la serie de tormentas que comenzaron a golpear la región desde este miércoles. Aunque hasta el momento las lluvias de esta semana no han causado mayores contratiempos, las autoridades locales ya se preparan para los estragos que pueda provocar esta nueva racha de precipitaciones.

Entre la tarde del viernes y la mañana del sábado, la región será azotada por vientos con la fuerza de los que se ven durante los huracanes, deslaves en las carreteras de las zonas montañosas y apagones en los nueve condados del Área de la Bahía.

El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) emitió varias alertas climáticas para la región. Por un lado, hay una advertencia por vientos severos; por el otro, está vigente una alerta por inundaciones repentinas ante la cantidad de agua que dejará la tormenta que llega la noche del viernes.

Este viernes por la mañana el NWS elevó el nivel de alerta debido a los vientos huracanados. La fuerza de las rachas comenzará a aumentar el viernes entre las 3:00 y las 5:00 pm y la velocidad de los ventarrones oscilará entre 50 y 65 mph.

La agencia meteorológica exhortó a todos los conductores del Área de la Bahía y el condado Monterey a no salir a las carreteras el sábado por la mañana, cuando las rachas de viento podrían elevarse hasta las 80 millas por hora. El peligro se hará más inminente si se maneja a través de los puentes de la región, como el puente el Bay Bridge y el Golden Gate.

“Los vientos van a derribar árboles y causar apagones generalizados en la región”, advirtió Drew Peterson, meteorólogo del NWS.

Inundaciones repentinas

Desde el principio de la semana el Servicio Meteorológico Nacional advirtió que la región sería azotada durante seis días consecutivos por una serie de tormentas. Pero la de este viernes promete llegar con una fuerza muy superior a las de los días previos.

La alerta por inundaciones repentinas está vigente desde la noche del viernes hasta la mañana del sábado. Dependiendo de la región, la cantidad de agua que caerá podría llegar hasta las 4 pulgadas, por lo que el NWS les pidió a los residentes no conducir sus vehículos a través de las zonas cercanas a las costas, debido lo rápido que pueden subir los niveles de los ríos y arroyos de la zona.

Las zonas elevadas son una preocupación para Peterson, quien aseguró que para el sábado aumentarán las posibilidades de que se presenten deslaves de tierra, lodo y rocas en las colinas del este de la Bahía y las montañas de Santa Cruz. El mismo fenómeno se podría dar en el norte de la la Bahía, sobre todo en las regiones afectadas por los incendios del año pasado.

Como medida preventiva, la agencia de transporte Caltrans cerrará a partir de las 5:00 pm de este viernes, un tramo de 44 millas de la Carretera 1, entre Deetjens y Ragged Point. Se prevé que la autopista se reabra a la circulación hasta el lunes, dependiendo de los daños que se puedan presentar en la vía.

Las autoridades locales del sur de la Bahía y del condado de Santa Clara han exhortado a la comunidad que vive en las zonas más bajas a estar preparados para posibles inundaciones. En varios puntos han puesto a disposición de la comunidad bolsas de arena y albergues que permanecerán abiertos hasta el próximo lunes.