STARKE, Florida.- El estado de Florida ejecutó este jueves a Frank Athen Walls, de 58 años, condenado por el asesinato de un hombre y una mujer durante un robo con invasión de hogar ocurrido en 1987. La ejecución por inyección letal inició a las 6:00 p.m. (hora del Este) en la Prisión Estatal de Florida, cerca de Starke, luego de que la Corte Suprema de Estados Unidos negara una suspensión solicitada por la defensa.
Ejecución 19 del 2025 en Florida: Frank Athen Walls y el doble homicidio de 1987
Frank Athen Walls, condenado por asesinar a una pareja durante un robo en una casa móvil en 1987, fue ejecutado este jueve. La Corte Suprema de EE.UU. rechazó una suspensión de último momento, en un año que ya marca récord estatal de ejecuciones.
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Walls fue condenado por dos cargos de asesinato, dos de secuestro, además de allanamiento y robo. Su caso se remonta a julio de 1987, cuando irrumpió en una casa móvil en el Panhandle de Florida donde vivían Edward Alger, aviador de la Base Aérea de Eglin, y su novia Ann Peterson.
De acuerdo con expedientes judiciales, Walls ató a la pareja; Alger logró liberarse y enfrentarlo, momento en el que Walls le cortó la garganta y luego le disparó en la cabeza. Posteriormente atacó a Peterson y le disparó mientras forcejeaban.
El acusado fue arrestado al día siguiente de que se encontraran los cuerpos, luego de que su compañero de vivienda alertara a la policía por comportamientos inusuales. Durante un cateo, investigadores hallaron objetos vinculados a la escena del crimen, y Walls confesó los asesinatos, según los registros del caso.
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Historial judicial y otros crímenes vinculados
Walls fue sentenciado a muerte en 1988, pero la Corte Suprema de Florida revocó esa condena y ordenó un nuevo juicio. En 1992, un jurado volvió a declararlo culpable y se le impuso nuevamente la pena capital.
Tras esa condena, evidencia de ADN lo vinculó con la violación y asesinato de Audrey Gygi en mayo de 1987. Walls se declaró “no contest ” en ese caso, es decir que no admitió culpa, pero aceptó la condena y la sentencia como si se hubiera declarado culpable, evitando un nuevo juicio y una posible segunda sentencia de muerte.
Además, admitió responsabilidad por otros dos homicidios: el de Tommie Lou Whiddon en marzo de 1985 y el de Cynthia Sue Condra en septiembre de 1986, como parte de un acuerdo con fiscales.
En las semanas previas a la fecha programada, los abogados de Walls presentaron apelaciones argumentando que su discapacidad intelectual y otros problemas médicos debían impedir la ejecución. La Corte Suprema de Florida rechazó esos planteamientos y, este jueves, la Corte Suprema federal negó la solicitud de suspensión.
La ejecución de Walls fue la 19ª en Florida en 2025, lo que extiende un récord estatal de ejecuciones en un solo año desde que la pena de muerte fue restablecida en Estados Unidos en 1976. En todo el país, 46 personas han sido ejecutadas por orden judicial en 2025, y más de una docena tienen fechas programadas para 2026.
Florida lidera el número de ejecuciones este año, por delante de Alabama, Carolina del Sur y Texas, con cinco cada uno. Según el Departamento de Correcciones del estado, todas las ejecuciones se realizan mediante inyección letal, con un protocolo que incluye un sedante, un paralizante y un fármaco que detiene el corazón.
