La justicia vaticana anunció el sábado haber imputado a cinco personas acusadas de "asociación criminal", de robo y de divulgación de documentos confidenciales sobre las malversaciones en la Santa Sede.
La justicia del Vaticano imputa a cinco personas por “Vatileaks”
Por divulgar documentos confidenciales pueden alcanzar hasta a ocho años de prisión.

La primera audiencia se celebrará el 24 de noviembre a las 10:30 hora local en el Vaticano y si alguno de los imputados no se presenta "será juzgado en contumacia".
La Justicia vaticana se adelanta así a la posibilidad de que alguno de los acusados no acuda a la audiencia. La Santa Sede ha informado que el 28 de noviembre, a las 12:30 hora local, es la fecha límite para que la Defensa presente sus pruebas, mientras que los testigos serán llamados con posterioridad.
Es la primera vez que el Vaticano abre un juicio a dos periodistas. Éstos publicaron el 5 de noviembre dos libros que revelan los escándalos financieros en el seno del Vaticano.
Un prelado español cercano del Opus Dei, Lucio Angel Vallejo Balda, y una consultora italiana, Francesca Immacolata Chaouqui, fueron detenidos por haber comunicado a estos dos periodistas italianos, Gianluigi Nuzzi y Emiliano Fittipaldi, documentos confidenciales.
Chaouqui fue puesta en libertad tras haber aceptado colaborar mientras Vallejo Balda sigue detenido en el Vaticano.
Una quinta persona, Nicola Maio, colaborador de Vallejo Balda, también es enjuiciado en este caso llamado "Vatileaks 2", y que se inició a principios de mes.
Estas cinco personas pueden ser condenadas hasta a ocho años de prisión. La divulgación de documentos confidenciales es un delito desde una ley vaticana de 2013.
Estos documentos estuvieron en posesión de una comisión de expertos, la Cosea, de la que formaban parte Vallejo Balda, Chaouqui y Maio, y que fue encargada en 2013 de hacer propuestas de reformas de las finanzas vaticanas al papa Francisco.
Emiliano Fittipaldi, que fue interrogado el lunes por la justicia del Vaticano, declaró a la prensa italiana que era "quizá un poco inocente" pues "pensaba que iban a investigar a aquellos cuyas actividades denuncio, y no a la persona que revela los crímenes".
Tras conocer la noticia, Nuzzi ha escrito un mensaje en la red social Twitter en el que afirma estar "orgulloso de haber escrito una investigación, orgulloso de #viacrucis #nomeequivoco #noinquisición".
Este escándalo recuerda al que afectó tanto en 2012 el pontificado de Benedicto XVI, cuyas cartas confidenciales fueron reveladas a la prensa por su mayordomo. Este asunto ya fue bautizado "Vatileaks" por la prensa italiana e internacional.
