En fotos: Melania Trump sonríe más en África que en la Casa Blanca

En medio de la convulsa situación en Washington, la primera dama ha decidido poner 5,266 millas entre ella y su marido y hacer su primer viaje internacional sola. Tras los insultos que ha hecho el presidente contra países africanos no parece tarea fácil congraciarse con quienes la reciben en esta gira, pero ella a punta de sonrisas y abrazos lo está logrando.

Por:Univision

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Este era el semblante de Melania Trump el lunes 1 de octubre cuando se embarcó en su primer viaje internacional sola como primera dama. Su destino, África, específicamente Ghana, Malawi, Kenia y Egipto. Este viaje no es ninguna rareza en la agenda de una primera dama de Estados Unidos, iguales hicieron en su momento Hillary Clinton, Laura Bush y Michelle Obama.

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No era, sin embargo, tan fácil para Melania Trump viajar a este continente después de que su marido lanzara insultos e improperios contra países como Nigeria al que llamó “país de chozas” y después de los recortes que hizo en enero de 2017 a la política llamada ‘Mexico City’ que da ayudas de caridad internacional. También se refirió a naciones que se beneficiaban del TPS, entre ellos varios africanos, como "países de mierda".

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Pero, en cuanto a la primera dama aterrizó en Acra, la capital de Ghana, su estrategia ha sido evidente: sonrisas cálidas y abrazos han sido la constante en esta gira, gestos que parecieran demostrar que poner 5,266 millas de distancia con la Casa Blanca le pusieran de verdad de otro humor.

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Melania visitó un hospital infantil en Acra, no sin estar rodeada de denuncias que han hecho líderes de organizaciones que trabajan con centros de atención reproductivos y de VIH sobre cómo ellos han sido uno de los más afectados tras los recortes del presidente Trump.

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"Esa es la primera dama que conozco. A ella le encanta conocer gente, aprender cosas nuevas y estar rodeada de niños. Esto es lo que ella es”, ha sentenciado entusiasta Stephanie Grisham, directora de comunicaciones de la señora Trump en medio de un viaje que, después de todo, ha llevado bien lejos a la primera dama de la convulsa situación que se vive en Washington con la polémica confirmación del juez Brett Kavanugh como magistrado de la Corte Suprema.

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Las repetidas fotografías de Melania Trump abrazando niños de las comitivas que le dan la bienvenida, pueden ser las imágenes más amables que circulen de un miembro de la Casa Blanca por estos días. La intención expresa de la primera ha sido dar a conocer y promover su programa 'Be Best' para combatir el cyberbullying.

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Durante su visita a Ghana la primera dama visitó el Castillo de Cape Coast en donde se reviven las terribles memorias de la esclavitud que acechó ese continente. "Este es un lugar muy especial. Nunca olvidaré las historias ”, dijo Melania Trump en el castillo rompiendo su costumbre de evadir a la prensa. "Lo que sucedió hace tantos años es realmente una tragedia".

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En su visita al segundo país de la gira, Malawi, la primera dama estuvo en un colegio que ha recibido dinero de la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos y donó 1,4 millones de libros.

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Lejos de la figura inaccesible y acartonada, Melania Trump le ha dado rienda suelta a su espíritu maternal mostrándose cálida y cercana con los pequeños que hacen parte de los actos en su homenaje. "Conocer a esos niños y comprender su forma de vida diferente es la razón por la que quería viajar aquí", explicó la primera dama. “Tuve la oportunidad de pasar tiempo con los estudiantes y tuve el honor de donar útiles escolares y balones de fútbol.

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Mientras lidiaba con los estragos que hacía el viento con su vestido caminaba con su homóloga Gertrude Maseko por el colegio que escogieron para su visita.

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En el mitin del presidente Donald Trump en Mississippi se tomó un tiempo para señalar el gran trabajo que está haciendo Melania Trump “besando y abrazando” niños en África. “Ustedes creen que es un trabajo fácil, no, ese no es un trabajo fácil, es uno realmente duro, y ella lo está haciendo fantástico”. Quizás a juzgar por los ademanes, la soltura en los gestos y las risas de Melania, a ella le parezca más fácil besar niños en África que estar secundando actos políticos de su esposo.

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