La superación de la peor fase de la pandemia de coronavirus trajo el regreso de los estadounidenses a las carreteras y con ello los accidentes de tráfico: 2021 fue el peor de los últimos 16 años.
"Crisis en las carreteras": muertes por accidentes de tráfico se dispararon en 2021
La superación de la peor fase de la pandemia de coronavirus trajo el regreso de los estadounidenses a las carreteras y con ello los accidentes de tráfico: 2021 fue el peor de los últimos 16 años.

Cerca de 43,000 personas murieron en accidentes de tráfico en EEUU el año pasado, un salto del 10.5% respecto a 2020, el mayor aumento desde que la Administración Nacional de Seguridad en el Tráfico en las Carreteras (NHTSA) comenzó a recopilar estos datos en 1975.
El secretario de Transporte, Pete Buttigieg, dijo que el país enfrenta una crisis en sus carreteras. La NHTSA urgió a las autoridades estatales y locales, a los conductores y activistas a unirse en un esfuerzo para revertir la tendencia de fatalidades.
Las cifras preliminares publicadas este martes por la NHTSA muestran que 42,915 personas murieron en accidentes de tráfico.
Los estadounidenses recorrieron en sus automóviles 325,000 millones de millas en 2021, 11.2% más que el año anterior.
Las estimaciones del gobierno muestran sin embargo que el ratio de fatalidades por milla recorrida se redujo. El año pasado fueron 1.33 muertes por cada cien millones de millas recorridas, respecto a las 1.34 de 2020.
NHTSA culpa a los conductores imprudentes de la crisis en las carreteras
Las muertes en el tráfico vienen experimentando fuertes aumentos desde 2019. NHTSA cupla a las imprudencias de los conductores durante la pandemia y ha ofrecido investigaciones que muestran que han aumentado los casos de exceso de velocidad y de personas que viajan sin el cinturón de seguridad.
Antes de 2019, el número de muertes había caído tres años seguidos. El viceadministrador de NHTSA, Steven Cliff, dijo que la crisis en las carreteras es un problema urgente y prevenible.
“Redoblaremos nuestros esfuerzos de seguridad y necesitamos que se nos unan todos, gobiernos estatales y locales, activistas por la seguridad, fabricantes de automóviles y conductores”, dijo Cliff en un comunicado. “Las vidas de todos nosotros dependen de ello”.
Buttigieg hizo referencia a una estrategia nacional presentada a principios de este año que está destinada a revertir la tendencia. El secretario había dicho anteriormente que durante los próximos dos años su departamento proporcionará orientación, así como miles de millones en subvenciones bajo la nueva ley de infraestructura del presidente Joe Biden para alentar a los estados y municipalidades a reducir los límites de velocidad y adoptar un diseño vial más seguro, como carriles exclusivos para bicicletas y autobuses, mejorar la iluminación y los pasos de peatones.
La estrategia también insta al uso de cámaras para el control de la velocidad, que según el Departamento de Transporte podrían proporcionar una aplicación más equitativa que las detenciones de tráfico de la policía.
En la declaración del martes, el departamento dijo que abrió su primera ronda de solicitudes para el programa, que tiene previsto destinar $6,000 millones durante cinco años a los esfuerzos locales para reducir los accidentes y las muertes en tráfico.











