Exmodelo dice que Trump la manoseó y la besó a la fuerza en un evento hace más de dos décadas

Una exmodelo afirma que fue agredida sexualmente por Donald Trump hace más de dos décadas cuando ambos veían con un grupo de amigos el US Open de tenis en un palco VIP, según contó en exclusiva al diario The Guardian .

Amy Dorris relató que el supuesto incidente ocurrió exactamente el viernes 5 de septiembre de 1997, cuando ella tenía 24 años y el magnate 51 años y estaba casado con su segunda esposa, Marla Maples.

Ese día, su novio de entonces Jason Binn, fundador de varias revistas de moda y estilo de vida de lujo, la llevó a conocer a su amigo Trump en su oficina de su torre en Manhattan. De ahí salieron todos al US Open en Queens.

Dorris vivía entonces con amigos en Boca Ratón, Florida, y viajaba regualmente a Miami para hacer trabajo como modelo y ocasionalmente como actriz.

Mientras veían el partido, la chica se levantó para ir al baño porque tenía un problema con sus lentes de contacto. Cuando salió, dice, Trump estaba esperando afuera. "Al principio pensé que estaba esperando para ir al baño, pero no fue así, desafortunadamente", dijo.

Afirma que todo sucedió después de un breve intercambio en el que recuerda haber reído nerviosamente y haberle dicho: "No, aléjate".

" Me metió la lengua en la garganta y yo lo empujé. Y entonces fue cuando su agarre se hizo más fuerte y sus manos estaban manoseando mi trasero, mis pechos, mi espalda, todo", según su versión.

" Estaba en sus manos y no podía salir de ellas", añadió a The Guardian.

"Estaba como en shock", añadió. " Me sentí violada, obviamente. Pero aún no lo estaba procesando y solo intentaba volver a hablar con todos y pasar un buen rato porque, no sé, me sentía presionada a comportarme así".

Dorris y su pareja continuaron viendo a Trump por varios días en NY en los que el magnate, según su relato, no volvió a agredirla aunque siguió persiguiéndola a pesar de que ella lo rechazó todas las veces.

Quiso denunciar en 2016

Dorris, que ahora tiene 48 años, tiene dos hijas gemelas y vive en Florida, proporcionó al diario supuestas pruebas para apoyar su relato, incluyendo el billete del US Open y seis fotos que la muestran con el magnate inmobiliario durante varios días en Nueva York.

The Guardian asegura que su relato ha sido confirmado por otras personas, entre ellas una amiga de Nueva York y la madre de Dorris, a quienes llamó inmediatamente después del supuesto incidente, así como un terapeuta y amigos con los que habló en los años posteriores.

A través de sus abogados, Trump niega rotundamente haber acosado, abusado o haberse comportado inadecuadamente con Dorris.

La exmodelo dijo que estuvo tentada a hacer público el supuesto incidente en 2016 cuando salieron a la luz público otras denuncias similares de otras mujeres, pero que se abstuvo para no perjudicar a su familia.

"Ahora siento que mis niñas están a punto de cumplir 13 años y quiero que sepan que no dejas que nadie te haga nada que no quieras", dijo. "Y prefiero ser un modelo a seguir. Quiero que vean que no me quedé callada, que me enfrenté a alguien que hizo algo inaceptable", manifestó.

Dorris es la decimoséptima mujer que ha denunciado haber sido agredida sexualmente por el presidente.

La mayoría de las denuncias de mujeres contra el mandatario por supuestos abusos se conocieron pocas semanas antes de las elecciones de 2016, después de que The Washington Post publicara una grabación de Trump durante una entrevista en 2005, en la que presumía de que su notoriedad le confería cierta autoridad para agarrar a las mujeres por los genitales. Insistentemente, Trump ha negado las acusaciones de mala conducta y ha tildado de "mentirosas" a todas sus acusadoras.