Surgen más fotos de iraquíes torturados
Las fotografías muestran escenas de torturas inflingidas a los prisioneros, similares a las que detonaron el escándalo en el mundo y llevaron al presidente George W. Bush a intervenir el miércoles en dos canales árabes de televisión.
Estas nuevas imágenes figuran entre un millar de fotos digitales almacenadas en discos compactos, la mayoría anónimas y tomadas como recuerdo por los soldados estadounidenses en Irak, en las que se encuentran también algunas tomas de militares posando sobre camellos o delante de mezquitas, según The Washington Post.
Este jueves, el presidente Bush pidió disculpas por los abusos cometidos contra los prisioneros iraquíes, durante una conferencia de prensa conjunta con el Rey Abdalá II de Jordania.
"Le dije que sentía la humillación y sufrimiento" de los detenidos, dijo Bush, quien en dos entrevistas el día anterior con cadenas de televisión en árabe no había pedido disculpas formales por esos hechos.
"Los malhechores serán juzgados", agregó el mandatario estadounidense, quien habló desde el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca, en Washington.
Rumsfeld no será despedido
Por otro lado, Bush declaró que el secretario de Defensa Donald Rumsfeld permanecerá en su cargo, pese a los reclamos para que éste renuncie tras el escándalo desatado por las torturas contra los prisioneros iraquíes.
"El es una parte importante de mi gabinete y se quedará", manifestó el presidente.
Entre las imágenes más controvertidas divulgadas el jueves por The Washington Post, se ve a un soldado sosteniendo con una cuerda a un prisionero desnudo, mientras lo tuerce en el suelo.
Otra foto muestra a un grupo de tres o cuatro prisioneros desnudos atados todos juntos en el suelo de la parte exterior de sus celdas, mientras los soldados estadounidenses giran a su alrededor.
En algunas de esas imágenes digitales varios prisioneros tienen bandas blancas de identificación sobre el pecho, indicó el diario, que no descarta la posibilidad de que algunas fotos hayan sido posadas.
Otras fotografías exponen a un prisionero desnudo esposado, llevando un manto negro, la espalda contra las barreras de la celda, y un prisionero desnudo con ropa femenina en la cabeza y la cara amarrada a una cama metálica de tal forma que su espalda queda arqueada.
También hay imágenes de soldados simulando actos sexuales entre ellos, mientras que otra muestra una vaca despellejada y destripada junto a soldados que posan con su cabeza en alto. Hay además decenas de fotografías de una cabeza de gato degollada, afirma el diario.
El Washington Post afirma que existen escenas de hombres heridos y de cuerpos. Una de ellas permite ver a un soldado sonriendo mientras posa encima de un cadáver.
El escándalo creado por las imágenes de abuso contra reos iraquíes han incrementado la presión a que se ve sometido el secretario Rumsfeld, para que dimita.
La Cruz Roja Internacional dijo que pidió repetidamente a las autoridades estadounidenses que "tomaran medidas correctivas" durante los meses que ocurrieron esos abusos.
Por otra parte, el senador demócrata Tom Harkin exigió la renuncia de Rumsfeld, "por el bien de nuestro país, la seguridad de nuestras tropas y nuestra imagen en el mundo".
"Si [Rumsfeld] no renuncia inmediatamente, el presidente debería destituirlo", dijo Harkin, el primer congresista que se pronuncia públicamente en este sentido.
El presidente Bush prometió al mundo árabe que se hará justicia en la investigación sobre los abusos cometidos en la prisión iraquí de Abu Ghraib. Los ayudantes de Bush dijeron que el presidente regañó a Rumsfeld por no haberle informado de las fotos que mostraban el maltrato de los prisioneros hasta que aparecieron en la televisión.
Dos ayudantes de Bush, que hablaron con la condición de guardar el anonimato, dijeron el jueves que el presidente respalda firmemente a Rumsfeld pese a la "leve reprimenda", según uno de ellos.
Rumsfeld canceló su aparición del jueves ante el Consejo de Asuntos Mundiales en Filadelfia y en su lugar envió al subsecretario de Defensa, Paul Wolfowitz. Una vocera del Pentágono dijo desconocer las razones de la cancelación.
A seis meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el escándalo de los prisioneros plantea un grave problema para Bush, que se encuentra ya en la defensiva debido al aumento de las bajas estadounidenses y la persistente violencia en Irak, un año después de haber declarado el cese de las principales operaciones de combate.
Las críticas por la forma en que el gobierno encaró el escándalo de los prisioneros aumentaron. El diario St. Louis Post-Dispatch dijo el jueves en un editorial que "Rumsfeld debería dimitir y llevarse con él a sus lugartenientes".
Presuntado por la cadena de televisión CBS si Bush debería despedir a Rumsfeld, el senador republicano John McCain se negó el jueves a "atreverse a decir al presidente lo que debe hacer".
No obstante, McCain agregó que "es obvio que el secretario Rumsfeld y otros tienen que dar muchas explicaciones, incluyendo por qué el Congreso no fue informado de ello".
McCain insistió además que la prisión de Abu Ghraib debería ser demolida porque es el símbolo de la tortura y los malos tratos "tanto del régimen de Saddam Hussein como de este".
Por otra parte, la vocera de la Cruz Roja Nada Doumani dijo en Ginebra que "estamos al tanto de lo sucedido, y en base a nuestros descubrimientos, pedimos repetidamente a las autoridades estadounidenses que tomaran medidas correctivas" en la prisión de Abu Ghraib.
La Cruz Roja internacional dijo que había estado trabajando con funcionarios estadounidenses para corregir los problemas en la prisión iraquí de Abu Ghraib antes de que se hicieran públicos los abusos a prisioneros.
"Las autoridades estadounidenses tomaron muy seriamente todas nuestras recomendaciones", expresó desde Aman, Jordania, Nada Doumani, portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja.
Sin embargo, Doumani manifestó que no podía aportar detalles sobre los problemas encontrados o si incluían "específicamente" las denuncias de abuso reveladas en los últimos días.
El escándalo por el tratamiento que reciben los prisioneros comenzó cuando el canal de televisión CBS transmitió imágenes fotográficas de guardias estadounidenses que se reían de prisioneros iraquíes que se encontraban en posiciones humillantes. Posteriormente se desencadenaron fuertes reclamos internacionales.
"Les pedimos que tomaran algunas medidas correctivas, probablemente no relacionadas directamente con este tema de tener gente desnuda ... o con prácticas homosexuales", manifestó Dumani a The Associated Press. "Pero no somos ingenuos", indicó.
"Nos expresamos de manera vaga porque los contenidos de nuestros informes deben seguir siendo confidenciales", expresó.
La portavoz indicó que las autoridades estadounidenses atendieron algunos de los problemas rápidamente y se tomaron más tiempo para otros, pero no aportó detalles sobre lo que hicieron.
La Cruz Roja es la única agencia independiente que visita a prisioneros detenidos por las autoridades de la ocupación en Irak.
La portavoz dijo que los informes, además de abarcar abusos y torturas a los prisioneros, incluirían el aislamiento de encarcelados, la necesidad de mayor higiene y atención médica. También se referirían al hecho de que algunos prisioneros reciben escasa alimentación y agua.
Denuncias de abuso contra anciana
Por otro lado, la enviada especial del primer ministro británico Tony Blair para los Derechos Humanos en Irak, Anna Clwyd, denunció el miércoles un caso de brutalidad de la que fue víctima una prisionera y acusó a las tropas estadounidenses de haber maltratado a una anciana iraquí.
"El caso tiene que ver con las alegaciones de malos tratos: después de haberla tirado por tierra (a la anciana) y de haberle dicho que era un burro, un hombre montó sobre su espalda", contó Clwyd en el telediario de la noche de la BBC.
Según la enviada especial de Blair, la anciana iraquí habría sido informada hace unos días que los dos hombres que la maltrataron están ahora en prisión.
Los generales de Estados Unidos se mostraron "conmocionados" cuando Clwyd les dio detalles sobre este caso de maltrato, que ocurrió en el centro de detención del aeropuerto de Bagdad, que se halla bajo el mismo comando militar que la prisión de Abu Ghraib, según el sitio internet de la BBC.
Un portavoz de Tony Blair, citado en el sitio internet de la BBC, explicó que el primer ministro británico y el presidente Bush no admiten los malos tratos infligidos a los prisioneros iraquíes y que los han condenado.
"Se van a realizar investigaciones sobre los casos individuales y la verdad será puesta en evidencia", precisó el portavoz.