Sharon da paso hacia la retirada de Gaza
El texto fue aprobado al término de una agitada reunión por nueve votos contra uno, el del ministro de Asuntos Sociales, Zvulon Orlev, del Partido Nacional Religioso (PNR, portavoz de los colonos).
Este proyecto de ley, que aún debe ser aprobado por el parlamento, constituye la primera etapa concreta del plan de Sharon que prevé desmantelar en 2005 las 21 colonias de la Franja de Gaza y evacuar a sus 8 mil colonos, así como suprimir cuatro pequeñas colonias aisladas en el norte de Cisjordania.
El portavoz del Consejo de colonias de la Franja de Gaza, Eran Sternberg, calificó la votación del gabinete de seguridad de "criminal".
"Esta decisión es ilegal, inmoral y criminal. Es una reacción histérica del primer ministro que siente que está a punto de perder su puesto", declaró a la Agence France Presse.
Según la radio militar, cada familia de colonos que sea evacuada de la franja de Gaza recibirá una indemnización de entre 200 mil y 300 mil dólares en función del tiempo que lleve viviendo allí.
En total, según la radio, las indemnizaciones podrían elevarse a unos 680 millones de dólares.
Sharon sometió ese texto a votación tras rechazar categóricamente la idea de un referéndum nacional sobre su plan, propuesta por el ministro de Finanzas Benjamín Netanyahu, su principal rival en el seno de su partido, el Likud.
Además, en una entrevista el primer ministro reiteró sus amenazas al dirigente palestino Yasser Arafat, asegurando que será "expulsado de los territorios" palestinos en el momento que Israel considere "propicio".
"Atribuimos a Israel la entera responsabilidad de estas amenazas y le advertimos que no las ejecute", dijo en reacción el ministro palestino encargado de las Negociaciones, Saeb Erakat, que denunció los métodos "mafiosos" del gobierno israelí.
Por otra parte, según un portavoz policial, se está investigando una serie de amenazas de muerte proferidas contra Sharon a causa de su plan de retirada.
Entretanto, dos soldados israelíes y dos palestinos resultaron heridos cerca de Kalkiliya, en el norte de Cisjordania, en un atentado suicida palestino reivindicado por las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, que costó la vida a su autor.
Ese grupo, relacionado con el Fatah, el movimiento de Arafat, aseguró en una llamada anónima que el ataque era "una primera respuesta" a la eliminación de tres importantes activistas de las Brigadas en un ataque aéreo israelí la víspera en Jenín, también en el norte de Cisjordania.
"Esta mañana se ha llevado a cabo un atentado suicida como primera respuesta pero nuestras verdaderas represalias tendrán lugar en Tel Aviv", amenazó Zakaria al Zubeidi, jefe de ese grupo en la región de Jenín, al asistir junto a otros 20 mil palestinos a los funerales de los tres activistas.
Poco después del atentado, el ejército israelí entró en el campo de refugiados de Nur Chams, en la región de Tulkarem, al norte de Kalkiliya, donde impuso el toque de queda.
Según fuentes de seguridad, el ejército rodea la casa de un jefe del grupo radical Yihad Islámica y un niño de 12 años resultó herido por disparos de militares en un tiroteo con activistas palestinos.
En Ramalá (Cisjordania), unos hombres armados mataron a un palestino sospechoso de colaborar con Israel, según fuentes médicas y de seguridad.
Investigan amenazas contra Sharon
Por otro lado, la policía está investigando las amenazas de muerte proferidas contra el primer ministro israelí Ariel Sharon a causa de su plan de retirada de la Franja de Gaza, declaró el martes el portavoz de la policía.
"La oficina encargada de la puesta en práctica del plan de separación (de los palestinos) ha recibido recientemente cierto número de llamadas telefónicas y amenazas contra su director (Jonathan Bassi) y contra Ariel Sharon", declaró el portavoz Gil Kleiman.
"No voy a entrar en detalles pero tomamos en serio estas amenazas", añadió.
La extrema derecha israelí subió el tono estos últimos días al exhortar a soldados y policías a negarse a evacuar a los colonos de la franja de Gaza y hablar de una "guerra civil".
Decenas de miles de personas, entre ellas muchos colonos, participaron el domingo en una manifestación contra el plan de Sharon en Jerusalén, durante la que cual se pidió su dimisión.
En 1995, un extremista judío asesinó al entonces primer ministro israelí Yitzhak Rabin para intentar sabotear los acuerdos de Oslo sobre la autonomía palestina que había firmado.