Testimonio de primo de Jackson sorprende
El testigo Rijo Jackson, de 12 años, primo del acusado, declaró el miércoles en el juicio que se le sigue al cantante por acusaciones de abuso de menores. Sus declaraciones se concentraron en el tipo de conducta que mostraron los hermanos durante sus visitas a la hacienda del cantante.
El testigo dijo que en el 2003 estaba con los hermanos en una unidad para invitados de la hacienda cuando ambos encendieron el televisor, sintonizaron un programa que mostraba mujeres desnudas y comenzaron a masturbarse.
Los hermanos instaron al primo a hacer lo mismo, pero en lugar de hacerlo, éste fue a la habitación de Jackson y le contó el tipo de programa que miraban sus invitados en la televisión.
"El no lo creyó", dijo Rijo.
En el careo subsecuente con el fiscal Ron Zonen, el joven dijo que temió decirle a Jackson que los invitados se masturbaban, y agregó que pasó la noche en la cama con su primo.
"¿Usted hacía eso con frecuencia?" preguntó Zonen.
"Sí", respondió Rijo.
Jackson, de 46 años, está acusado de abusar a un niño de 13 en febrero o marzo del 2003, además de darle a beber vino. También está acusado de confabularse para mantener cautiva a la familia del niño hasta que el grupo refutase a participar en un documental que perjudicaba la reputación del artista.
Rijo también declaró que vio a los niños llevarse una botella de vino, abrir gavetas en la casa y llevarse dinero que pertenecía al maestro cocinero y a otro empleado.
Una hermana de Rijo, Simone, de 16 años, también había declarado previamente que vio a los niños llevarse vino.
El mismo adolescente que ahora acusa a Michael Jackson de abuso sexual había asegurado a principios de 2003 que el cantante nunca le había hecho nada, declaró este martes una asistente social ante la Corte de Santa María.
La asistente social Irene Peters, del departamento infantil de Los Angeles, dijo que entrevistó al joven actualmente promotor de la denuncia cuando tenía 13 años, el 20 de febrero de 2003. En esa época, según la denuncia, Jackson abusaba de él.
"Todo el mundo piensa que Michael Jackson abusó de mí", pero en realidad "nunca me tocó", habría dicho el adolescente, según Peters, que lo entrevistó en la casa de quien por ese entonces era el novio de su madre.
La asistente afirmó además que el joven le negó haber dormido en la misma cama con Jackson. "Le pregunté claramente: '¿Dormiste en la misma cama con Michael Jackson?'. 'No', me contestó".
Sin embargo, el propio Jackson había reconocido en un explosivo documental televisivo que ambos compartieron la cama.
Peters agregó que la madre del joven -a quien la defensa responsabiliza de inventar el caso para obtener dinero- alabó a Jackson y dijo que no le había hecho nada a su hijo.
"Dijo que Michael había sido como un padre para sus hijos", declaró la asistente social ante la corte. Además, mostró un video en el que se ve al adolescente y a Jackson mirando unos cisnes, agregó.
La testigo reconoció que dos empleados de Jackson estaban presentes en el apartamento cuando llegaron los técnicos de la seguridad social, pero que se les hizo salir de la habitación antes de entrevistar a la familia.
La madre del adolescente denunció durante su testimonio en la corte que dos empleados de Jackson que estaban presentes durante la entrevista la habían obligado a mentirle a los asistentes sociales.
Peters declaró este martes que su informe a su superior luego de la entrevista afirmaba que "las acusaciones de abuso sexual contra Michael Jackson eran infundadas a ese momento y en base a la información recabada".
Sin embargo, Peterson también recuerda que la mujer le dijo que "Michael quería enviarla a Brasil, pero que ella no quería ir".
El lunes un policía declaró al jurado que dos ex empleados de la finca Neverland, propiedad de Jackson, rehusaron denunciar que lo vieron practicándole sexo oral a un chico porque temieron por su seguridad.
El agente Russell Birhcim declaró que en 1994 fue contactado por dos ex guardias de seguridad de Neverland que dijeron tener información de Jackson "besando, acariciando y chupando el pene de un chico".
Pero los hombres -quienes ya comparecieron en el juicio a Jackson- eligieron no presentarse oficialmente en su momento ya que no se les podía asegurar acceso a un programa de protección de testigos del gobierno de Estados Unidos, indicó el detective.
Un ex empleado de la hacienda de Jackson dijo el martes que la hermana del acusador del artista habló con él frecuentemente durante su visita a Neverland, e incluso después, y que nunca se quejó de haber sido maltratada.
El ex empleado Angel Vivanco, que era asistente de cocina en la hacienda, dijo que pasó algún tiempo con la hermana cinco o seis veces después del trabajo, mientras la familia se hallaban en la hacienda, en febrero y marzo del 2003, es decir, el período en que se acusa a Jackson de abusar del hermano de la niña y de confabularse para mantener a la familia cautiva.
Vivanco dijo que la hermana continuó llamándolo por teléfono durante dos semanas después de haberse marchado del lugar, pero que nunca dijo que Jackson o cualquier otra persona la hubiese maltratado.
El jurado también escuchó declaraciones de Irene Peters, trabajadora social para asuntos de la infancia del Condado de Los Angeles, que dijo haber entrevistado al acusador y a su familia el 20 de febrero del 2003, y que el niño negó en esa ocasión haber sido víctima de abusos sexuales.
Los fiscales afirman que Jackson abusó del niño entre el 20 de febrero y el 12 de marzo de ese mismo año.
Los abogados defensores tratan de demostrar que la familia del acusador inventó las acusaciones sexuales con el fin de recibir dinero de Jackson.
El lunes, Vivanco declaró que el hermano menor del acusador le exigió una vez que le hiciese una leche malteada con licor y en otra ocasión le puso un cuchillo al cuello. Vivanco también dijo que el acusador utilizó en una ocasión una mala palabra para exigir que le diesen algo de comer.
En el careo siguiente con el fiscal Ron Zonen, Vivanco admitió no haber informado acerca de tales incidentes cuando fue entrevistado inicialmente por las autoridades, porque no reconoció el apellido de la familia durante esa entrevista.
No obstante, el testigo dijo que informó a dos supervisores acerca de los incidentes.