📸 Día del trabajo: Estos 15 oficios se resisten a ser desplazados por la tecnología
Computadoras, internet, robots y maquinaria pesada ponen en riesgo decenas de oficios en todo el mundo. Estos trabajadores luchan por mantener la forma tradicional de hacer las cosas en un planeta agobiado por la tecnología.
Oficinista callejera, Colombia. Candelaria Pinilla, de 63 años de edad, trabaja frente a la oficina distrital de impuestos en Bogotá. En puestos callejeros improvisados, estos expertos ayudan a sus clientes con los trámites burocráticos. Conocen mejor que nadie cómo llenar formularios, redactar documentos y escribir cartas en sus máquinas.
Luis Acosta/Getty Images
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Dependiente de una tienda de videos, Nueva York. Howard, de 67 años, atiende ‘Video Room’, un local que vende y alquila películas y discos en formatos DVD, VHS y LP, entre otros. En la era de Netflix, Hulu y Amazon este establecimiento de Manhattan es uno de los pocos que ofrece películas clásicas o nuevos lanzamientos en formato no digital.
Hector Retamal/Getty Images
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Lavandera, Ecuador. Delia Veloz, de 74 años, trabaja en la lavandería municipal del barrio Ermita de Quito, la capital de Ecuador. En un mundo donde este oficio se automatizó hace varias décadas, Veloz ha sido lavandera a mano por más de 50 años y gana unos cuatro dólares por día.
Rodrigo Buendía/Getty Images
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Picapiedras, Honduras. José Díaz, de 66 años, es cantero en el municipio de Ojojona, a unas 15 millas al sur de Tegucigalpa. Sin más maquinaria que un martillo y un cincel, Díaz dedica su vida a despiezar enormes rocas.
Orlando Sierra/Getty Images
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Ascensorista, Brasil. Dilson Lopes Santana, de 60 años, conduce el elevador del Centro Cultural del Banco de Brasil, en el centro de Río de Janeiro. Dilson, quien vive en la favela Cantagalo, ha tenido este trabajo durante veinticinco años. Le contó a la agencia AFP que cada vez que puede ofrece a los visitantes sugerencias de las salas de exposiciones, los teatros y la biblioteca del centro cultural, conectados por los ascensores del inmenso edificio.
Mauro Pimentel/Getty Images
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Laboratorista fotográfico, Venezuela. Rodrigo Benavides, de 58 años, es uno de los pocos técnicos de fotografía analógica que aún queda en su país. En su laboratorio de Caracas, Benavides revela y copia fotografías a la antigua, con químicos y ampliadoras en un cuarto oscuro.
Federico Parra/Getty Images
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Fotógrafo, México. César Arizmendi, de 73 años, y su hijo Uriel manejan un estudio de fotografía en la Ciudad de México. Aunque lleva un negocio amenazado por la tecnología, Arizmendi, quien es padre de siete y abuelo de ocho, destaca que durante su carrera ha fotografiado a políticos y artistas, entre ellos el candidato asesinado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Donaldo Colosio y cantantes como Luis Aguilar.
Yuri Cortes/Getty Images
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Gnomista, Italia. Fabio Garnero es uno de los últimos expertos en las técnicas tradicionales para calcular y dibujar relojes de sol en su país. Dedica su tiempo a catalogar y restaurar relojes de sol antiguos en toda Europa.
Marco Bertorello/ Getty Images
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Perfumista, Serbia. Nenan Jovanov, de 70 años, pertenece a la tercera generación de un negocio familiar de perfumes. Cuenta que la tienda donde creció se convirtió en una ‘cápsula del tiempo’. “Solía haber 23 perfumerías de este tipo en Belgrado, ahora soy el único que queda", aseguró.
Andrej Isakovic/Getty Images
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Reparador de paraguas, Argentina. Elías Fernández, de 87 años, ha reparado sombrillas desde 1955. Los paraguas fueron alguna vez un artículo de lujo. Ahora los fabrican en masa, más baratos y prácticamente desechables.
Eitan Abramovich/Getty Images
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Vendedor de periódicos, Grecia. Kostas es propietario de un kiosco en la plaza Omonia, Atenas. La llegada de los medios digitales y las redes sociales ha hecho que los consumidores de medios impresos sean menos en todo el mundo.
Louisa Gouliamaki/Getty Images
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Encuadernador, Bulgaria. Kalin Daskalov, alias Stopan, hace libros y revistas con las técnicas tradicionales de encuadernación. Con la industrialización de la producción de libros y cuadernos, esta actividad ya no la hace mucha gente.
Dimitar Dilkoff/Getty Images
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Relojero, Uruguay. Abdel Ghaffar se dedica a mantener funcionando correctamente el antiguo reloj de la Cátedra de Montevideo, que opera con un sistema mecánico.
Pablo Porciuncula Brune/Getty Images
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Ladrillero, El Salvador. José David Farrier, de 44 años, trabaja en una fábrica de ladrillos en Armenia, a unas 24 millas al oeste de San Salvador. Ha sido ladrillero durante 20 años con lo que gana cerca de 50 dólares por semana.
Marvin Recinos/Getty Images
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Reparador de máquinas de coser, Rusia. Andreja Nikolic, de 69 años, tiene un taller de reparación de máquinas de coser desde hace 40 años en Belgrado. Dijo que comparado con viejos tiempos, hoy en día los clientes rara vez traen máquinas de coser o máquinas escribir para reparar.