Irene Ibáñez Díaz recuerda el día que se desmayó y su vista se nubló. A partir de ahí, su vida dio un giro dramático: perdió el trabajo, no tiene seguro de salud y no le queda dinero para pagar la renta. Su esposa está a la espera de un trasplante de riñón. Su historia simboliza la de muchos hispanos que están más expuestos a perder su hogar desde que la Corte Suprema bloqueó la moratoria de desalojos.