Gordon amenaza tras Florence
A las 2100 GMT, Gordon tenía vientos máximos sostenidos superiores a 45 mph (72 kilómetros por hora) y se esperaba que podría fortalecerse hasta convertirse en huracán para el miércoles.La séptima tormenta con nombre de la temporada de huracanes de 2006 se encontraba a unas 425 millas (684 kilómetros) al noreste de las Islas de Sotavento y se desplazaba al noroeste a unas 9 mph (15 kph).La tormenta Gordon se formó a partir de una depresión tropical que se formó la tarde del domingo. Es un sistema mucho más pequeño que Florence, pero se desplazaba por su mismo rumbo hacia las Bermudas, indicaron los meteorólogos.Daños de Florence en BermudasFlorence, el segundo huracán de la temporada, con sus potentes vientos arrancó ventanas y techos de casas y derribó el servicio eléctrico par miles de personas en Bermudas el lunes antes de pasar por un costado del archipiélago de las islas británicas del Caribe y antes de dirigirse hacia el océano abierto."Todavía es muy pronto para decir si será una amenaza para las Bermudas. Incluso si Gordon se dirigiera hacia las Bermudas, aún está a varios días de distancia", indicó el especialista en huracanes, Eric Blake.
Bermuda es un pequeño territorio británico de 67 mil habitantes en el Atlántico, al este de las costas estadounidenses.
En 2003 fue azotada por el huracán "Fabian", que mató a cuatro personas y dejó pérdidas calculadas en 300 millones de dólares.
Florence era la sexta tormenta tropical de la temporada 2006 que inició el 1 de junio y termina el 30 de septiembre.
La quinta tormenta fue Ernesto, que se formó el 25 de agosto en el sur del Caribe y que golpeó Florida y Carolina del Norte.
Ernesto adquirió rápidamente la categoría de un huracán menor y se debilitó a tormenta tropical antes de causar al menos nueve muertos en Estados Unidos y dos en Haití.
Temporada 2005
En la temporada 2005 se formaron 28 tormentas y 15 huracanes, incluyendo al devastador Katrina que el 29 de agosto impactó el la costa del Golfo de México y causó grandes daños en el estado de Luisiana.
Para el 2006 la temporada de huracanes no ha sido tan severa como se pronosticó a comienzo de año.
El CNH pronostica la formación de 12 a 15 tormentas y de siete a nueve huracanes.
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias de Estados Unidos (FEMA) tiene vigente un plan de preparación para huracanes, guía que puntualiza qué hacer antes, durante y después del paso de un meteoro.
El plan enfatiza acerca de las rutas de evacuación más seguras y los refugios cercanos al lugar de residencia.
FEMA recomienda antes de la embestida de un huracán:
Prepárese para conducir de 20 a 50 millas tierra adentro para localizar un lugar seguro.
Tenga a la mano suministros para casos de desastre, tales como linterna y pilas adicionales, radio portátil, operado con pilas, y pilas adicionales.
También tenga a mano botiquín y manual de primeros auxilios.
Reúna alimentos y agua de emergencia, un abridor de latas, medicamentos esenciales, dinero en efectivo, tarjetas de crédito y zapatos resistentes.
Sobre las mascotas
Es posible que en los albergues para pasar un huracán no se admitan mascotas por razones sanitarias y de espacio. Póngase en contacto con la sociedad humanitaria de su localidad para que le proporcionen información de refugios para animales en la zona donde vive.
Prepare a su familia
Asegúrese de que todos los miembros de la familia sepan como reaccionar después de un huracán.
Enseñe a los miembros de la familia cómo y cuándo desconectar el gas, la electricidad y el suministro de agua.
Enseñe a los niños cómo y cuándo llamar al 911, la policía o departamento de bomberos y qué estación de radio sintonizar para oír información de emergencia.
Proteja sus ventanas
Las contraventanas permanentes son la mejor protección. Un método más barato consiste en colocar paneles de madera. Haga esto mucho antes de que llegue la tormenta.
Pode o corte las ramas muertas o débiles de los árboles que puedan dañar la estructura de su vivienda.
Verifique su seguro
Puede informarse del Programa Nacional del Seguro contra Inundaciones a través de su agente de seguros u oficina de manejo de emergencia en su localidad. Normalmente hay un período de espera de 30 días para que la nueva póliza entre en vigor.
Las pólizas de los propietarios de casas no cubren los daños causados por las inundaciones que acompañan a un huracán.
En caso de que los miembros de la familia se separen unos de otros durante un desastre (una posibilidad real durante el día cuando los adultos se encuentran en el trabajo y los niños en la escuela), tenga un plan para volver a reunirse.
Pida a un pariente o amigo que viva fuera del estado que actúe como el "contacto de la familia".
Después de un desastre, a menudo es más fácil hacer llamadas de larga distancia. Asegúrese de que todos en la familia sepan el nombre, dirección y teléfono de la persona de contacto.
Vigilancia de huracán
Una vigilancia de huracán se emite cuando existe una amenaza de que se presente un huracán dentro de 24 a 36 horas. Si la emiten, tenga en cuenta:
Escuche los informes del avance del huracán en un radio o televisor operado con pilas.
Verifique los suministros de emergencia.
Póngale combustible al auto.
Meta todos los objetos que están en exteriores, como muebles de jardín, juguetes y herramientas de jardinería y sujete todos los objetos que no pueda llevar al interior.
Asegure los edificios cerrando y colocando tablones sobre las ventanas. Quite las antenas exteriores.
Ponga el refrigerador y el congelador en la temperatura más fría. Ábralos sólo cuando sea absolutamente necesario y ciérrelos rápidamente.
Almacene agua potable en la tina del baño, jarras, botellas y utensilios de cocina limpios.
Guarde los objetos valiosos y los documentos personales en un recipiente impermeable en el nivel más alto de su casa.
Amarre las embarcaciones de manera firme o llévelas a un lugar seguro designado. Use cuerdas o cadenas para asegurar los botes al remolque. Use ataduras para fijar el remolque al suelo o a la casa.
Una Advertencia de Huracán se emite cuando se esperan condiciones de huracán (vientos de 74 millas por hora -118 kms- o superiores, o agua y oleaje agitados peligrosamente altos) en 24 horas o menos. Escuche constantemente un radio o televisor operado con pilas para enterarse de las instrucciones oficiales. Si se encuentra en una casa móvil, verifique las sujeciones y evacue de inmediato. Evite los ascensores. Si está en casa permanezca dentro, lejos de las ventanas, tragaluces y puertas de vidrio. Mantenga a la mano un suministro de linternas y pilas adicionales. Evite las llamas abiertas, como las velas y las lámparas de queroseno, como fuente de luz. Si se interrumpe el suministro de energía eléctrica, apague los principales aparatos electrodomésticos para reducir las variaciones de voltaje cuando la electricidad se restablezca. En caso de evacuación Si las autoridades indican que la evacuación es necesaria: Salga tan pronto como sea posible. Evite los caminos inundados y tenga cuidados con los puentes arrasados. Asegure su casa desconectando los aparatos eléctricos y cierre la electricidad y la válvula principal del agua. Dígale a alguien que no se encuentre en el área de la tormenta a dónde piensa ir. Si el tiempo lo permite y usted vive en una zona de crecientes identificada, eleve los muebles para protegerlos contra las inundaciones, o mejor aún, trasládelos a un piso más alto. Lleve los suministros de emergencia preparados con anticipación, ropa protectora y abrigadora, mantas y bolsas para dormir a un refugio. Cierre con llave la casa y salga. Después del huracán Sintonice las estaciones de radio locales para oír información. Ayude a las personas lesionadas o atrapadas. Administre primeros auxilios cuando corresponda. No mueva a las personas lesionadas de gravedad a menos que se encuentren en peligro inmediato de sufrir más lesiones. Solicite ayuda. Regrese a casa sólo después de que las autoridades le avisen que no hay peligro. Evite los cables de energía eléctrica sueltos o colgantes y repórtelos de inmediato a la compañía de luz, policía o departamento de bomberos. Entre en su casa con precaución. Tenga cuidado de las serpientes, insectos y animales arrastrados a terrenos altos por el agua de las crecidas. Abra las ventanas y puertas para ventilar y secar su casa. Revise los alimentos refrigerados para ver si no están echados a perder. Tome fotografías de los daños, tanto de la casa como de sus contenidos, para las reclamaciones del seguro. Conduzca sólo si es absolutamente necesario y evite los caminos inundados y los puentes arrasados. Use el teléfono sólo para llamadas de emergencia. Inspeccione los servicios Verifique si no hay fugas de gas. Si huele a gas u oye un ruido sibilante, abra una ventana y salga con prontitud del edificio. Cierre el gas en la válvula principal del exterior si es posible y llame a la compañía de gas desde la casa de algún vecino. Si cierra el gas por cualquier razón, sólo un profesional puede volver a conectarlo. Busque daños en el sistema eléctrico. Si ve chispas o alambres rotos o pelados, o si huele a aislamiento caliente, desconecte la electricidad en la caja de fusibles o interruptor de circuitos principal. Si tiene que pisar agua para llegar a la caja de fusibles o interruptor de circuitos, llame a un electricista para que le diga cómo hacerlo. Verifique que no haya daños en las tuberías de agua y drenaje. Si sospecha que las tuberías del drenaje pueden estar dañadas, evite usar los inodoros y llame a un plomero. Si las tuberías de agua están dañadas, comuníquese con la compañía que le suministra el agua y evite el agua de la llave. Puede obtener agua potable si derrite cubos de hielo.