Tres condados de Jackson están en estado de emergencia después de que el río Pearl se desbordara. Más de 500 casas han quedado sin electricidad mientras unas 30 personas han sido evacuadas en canoas a refugios seguros. La previsión para la semana es que continúen las lluvias por lo que el gobernador Tate Revees alertó que pasarán días antes de que regrese la normalidad.