En asambleas a lo largo del estado, los votantes demócratas registrados se agrupan por su candidato favorito, negocian sus preferencias y seleccionan a un ganador. Los aspirantes necesitan obtener el apoyo de al menos el 15% de los votos para que su candidatura sea "viable" y esta selección en Iowa se convierte en una importante referencia para el resto de las primarias.