La piedra de color D, sin ninguna falla interna, es el único diamante blanco cortado en el estilo clásico de una esmeralda, con la mayor clasificación de color y claridad, y de más de 100 quilates, que sale a subasta, según Sotheby's.
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La casa de subastas había valorado la joya en entre 19 y 25 millones de dólares y la llamó "el diamante perfecto más grande, con un corte clásico de esmeralda, jamás sacado a subasta".
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Descubierto en las minas De Beers, en Sudáfrica, el diamante fue cortado, pulido y perfeccionado durante más de un año hasta convertirse en la pieza estrella de una subasta de joyería de Sotheby's de 370 lotes.
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El comprador participó en la puja por teléfono, pero quiso mantener el anonimato, dijo Sotheby's. El precio final fue de 22,090,000 dólares, incluida la prima del comprador.
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Gary Schuler, jefe del departamento de joyería de Shotheby's en Nueva York, se refirió la piedra como "la definición de la perfección".
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"El color es más blanco que el blanco, está libre de cualquier imperfección interna y es tan transparente que sólo puede compararse con un estanque de agua congelada", dijo antes de la venta.
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El récord para cualquier joya es de 46 millones de dólares, alcanzado por un diamante rosado de 24.78 quilates cortado en forma de esmeralda, establecido en Sotheby's en 2010.