Explosiones y ráfagas de balas generaron el caos en un complejo que alberga restaurantes, oficinas y un hotel, en la capital de Kenia. Mientras tanto, el grupo terrorista al-Shabab, responsable del ataque al centro comercial de Nairobi que dejó 67 muertos en 2013, reclamó la autoría del atentado. Aunque aún se desconoce el número exacto de fallecidos y heridos, los primeros reportes del hospital local aseguran que al menos una persona murió en el hecho.