Luca Malaschnichenk, un joven aficionado a la arqueología, hizo el hallazgo en enero de este año cuando examinaba con un detector de metales un campo de Rügen, la mayor isla de Alemania. Desde entonces especialistas y voluntarios han encontrado 600 piezas de más de 1,000 años de antigüedad pertenecientes a Harald 'Bluetooth’, rey vikingo del siglo X.