SAN FRANCISCO, CA.- La Comisión de Servicios Públicos de San Francisco (SF) ha anunciado la necesidad urgente de reemplazar todas las tuberías en la cuadra de la calle Fillmore, ubicada en el histórico vecindario de Cow Hollow.
Tardarán hasta 6 semanas en reparar la fuga de agua que causó un socavón en San Francisco
La histórica calle Fillmore de San Francisco estará cerrada por 6 semanas para desarrollar un proyecto necesario de reemplazo de tuberías tras un sumidero y problemas de tuberías obsoletas.
Por:Univision
Video Ruptura de tubería en San Francisco deja un socavón gigante en calles de Pacific Heights
Este proyecto de reparación, que se espera que dure aproximadamente seis semanas, se ha vuelto necesario debido al deterioro avanzado de las tuberías de agua, alcantarillado y gas en la zona, un problema que se hizo evidente después de que un sumidero se formara en el pavimento el pasado lunes, como consecuencia de la ruptura de una tubería de agua con más de 70 años de antigüedad en la intersección de las calles Green y Fillmore.
La seguridad de los residentes y la integridad de la infraestructura urbana son las principales preocupaciones que han llevado a la Comisión de Servicios Públicos a tomar esta decisión.
Cierran calle Filmore, entre Union y Green
La calle Fillmore permanecerá cerrada al tráfico entre las calles Union y Green durante la duración de este proyecto, lo que afectará a la movilidad de los residentes y las empresas de la zona.
La Oficina del Fiscal de la Ciudad de San Francisco ha emitido un llamado a los propietarios de viviendas y empresas para que presenten reclamaciones si han sufrido algún daño como resultado de la ruptura de la tubería.
Uno de los mayores problemas que enfrentan algunas empresas en la zona es la disminución del tráfico peatonal debido al cierre de la carretera.
La titánica labor de mantener las tuberías de San Francisco
San Francisco Public Utilities Commission (SFPUC), la entidad encargada de operar y mantener el sistema de tuberías de agua de la ciudad, administra una red que se extiende por unas 1200 millas a lo largo y ancho de San Francisco.
Para dimensionar esta cifra, es importante destacar que si estiráramos todas las tuberías de extremo a extremo, podrían alcanzar una distancia que iría desde San Francisco hasta Dodge City, Kansas.
Aproximadamente el 20% de estas tuberías de agua tienen alrededor de 100 años de antigüedad y están hechas de hierro fundido.
Con el tiempo, muchas de estas tuberías han llegado al final de su vida útil y se han vuelto más propensas a rupturas y problemas de mantenimiento.
Prevenir fugas: una tarea casi imposible
A pesar de los esfuerzos activos de SFPUC para reemplazar las tuberías de agua más antiguas y vulnerables de manera regular, no es posible prevenir todas las roturas de tuberías de agua.
En promedio, se registran entre 100 y 200 roturas de tuberías de agua en el sistema de la ciudad cada año.
Estas tuberías varían considerablemente en tamaño, desde conductos de 5 pies de diámetro hasta tuberías de apenas 2 pulgadas de diámetro.
La regulación del flujo de agua en estas tuberías se realiza mediante válvulas similares a los grifos domésticos.
El personal de la División de Distribución de la Ciudad de SFPUC trabaja las 24 horas del día, los 7 días de la semana, sin importar las condiciones climáticas, los días festivos o la hora del día, para monitorear el sistema y responder de manera efectiva a cualquier rotura en las tuberías principales de agua.
¿Cómo se reporta y atiende una fuga de agua?
Pero, ¿qué sucede en una rotura típica de una tubería de agua en la ciudad? En primer lugar, cualquier fuga o torrente de agua que pueda indicar una rotura principal se informa a la División de Distribución de la Ciudad a través del número 311.
Luego, un operador de válvulas de alto nivel, conocido como "Gateman", se desplaza al lugar para investigar y confirmar la rotura en la tubería de agua.
Después, el operador se comunica con el sistema de alerta de servicio subterráneo de EE. UU., el cual envía a un técnico de campo para marcar todas las líneas de servicios públicos, incluyendo las líneas de gas, antes de cualquier excavación.
Este proceso puede llevar algún tiempo, especialmente si la rotura se produce durante la noche.
Posteriormente, un capataz coordina un equipo de respuesta para lidiar con la rotura principal en cuestión.
Este equipo de respuesta principal incluye a un capataz, dos plomeros, un trabajador, un camionero y un operador de retroexcavadora.
Dependiendo de la naturaleza específica de la rotura de la tubería principal de agua, puede ser necesario el despliegue de personal adicional, como maquinistas, carpinteros para reforzar las zanjas y soldadores.
Una vez en el lugar de la rotura, el equipo trabaja para poner nuevamente en servicio la tubería principal, llenar el hoyo excavado y preparar la pavimentación temporal.
Para garantizar la seguridad de los conductores y peatones en la zona, se establecen controles de tráfico, como bandereros y conos, señales de advertencia altas y tableros de flechas que dirigen el tráfico de manera segura alrededor del área de trabajo.
El proceso continúa con la excavación de un hoyo sobre la tubería de agua rota, que suele estar lleno de agua en un principio.
Para eliminar el agua y permitir que el personal inspeccione la tubería principal y diagnostique el problema, se utilizan bombas. Una vez que se identifica una solución, el operador de válvulas cierra las válvulas necesarias para cortar el suministro de agua al área circundante, lo que puede afectar temporalmente el servicio de agua de los clientes conectados a la red principal.
Sin embargo, se hace un esfuerzo consciente para minimizar el impacto en la mayor cantidad posible de clientes durante una rotura de tubería.
En cuanto a la reparación en sí, los equipos pueden colocar una abrazadera especial en la parte rota de la tubería o retirar e instalar un trozo completamente nuevo de tubería para solucionar el problema.
El método de reparación varía según el tipo de rotura y el tipo de tubería afectada. Tras la reparación, se realiza una desinfección y lavado de la nueva línea antes de ponerla nuevamente en servicio.
Una vez que se restablece el servicio normal de agua, las cuadrillas completan el proceso llenando el hoyo excavado, limpiando la zona y colocando un parche de pavimento temporal para garantizar la seguridad de la carretera.
La restauración final, que implica la colocación de pavimento permanente, generalmente se lleva a cabo en una fecha posterior, garantizando que la calle quede completamente rehabilitada y en condiciones óptimas.
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