LOS ÁNGELES — El republicano Steve Garvey avanza hacia las elecciones de noviembre para ocupar el escaño en el Senado de EE. UU. que durante tres décadas ocupó la fallecida Dianne Feinstein, una rara oportunidad para el Partido Republicano de competir en una destacada contienda estatal en este bastión demócrata.
Adam Schiff y Steve Garvey avanzan a la elección general del Senado por California
Los dos candidatos con más votos en la elección primaria para llegar al Senado por California fueron el demócrata Adam Schiff y el republicano Steve Garvey. Los candidatos se medirán el próximo 5 de noviembre en la elección general.
Por:AP
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El ex Jugador Más Valioso del béisbol, que jugó para los Dodgers de Los Ángeles y los Padres de San Diego, se enfrentará al representante demócrata Adam Schiff.
California coloca a todos los candidatos, independientemente de su partido, en la misma boleta de las elecciones primarias, y los dos que obtienen más votos avanzan a las elecciones generales.
Esto significa que los republicanos a veces quedan excluidos de contiendas estatales de alto perfil debido al control que los demócratas tienen sobre el estado.
El Partido Republicano no ha logrado llevar a un candidato a las elecciones generales en dos de las tres últimas elecciones al Senado de California.
Se espera una victoria demócrata en las elecciones de noviembre
Sin embargo, se espera que los demócratas retengan fácilmente el escaño en el Senado en noviembre, un alivio para el partido mientras busca defender una estrecha mayoría. Un republicano no gana una carrera al Senado en California desde 1988.
Pero la campaña representa de todas formas una nueva era en la política de California, que durante mucho tiempo estuvo dominada por Feinstein y un puñado de otros políticos veteranos.
Garvey y Schiff también avanzaron a la boleta de noviembre en la carrera para ocupar el resto del mandato de Feinstein, después de las elecciones generales.
El gobernador demócrata Gavin Newsom designó a Laphonza Butler, una organizadora demócrata de larga trayectoria, para completar el mandato de Feinstein, y Butler optó por no buscar la elección al cargo.
El ganador de las elecciones de noviembre cumpliría un mandato truncado hasta principios de enero, cuando comenzaría el mandato completo de seis años.
La contienda es la primera elección abierta al Senado de EE. UU. en California desde 2016. Incluso antes de que Feinstein anunciara a principios de 2023 que no buscaría la reelección, muchos demócratas ambiciosos del estado esperaban ansiosos su oportunidad para obtener el codiciado escaño.
De los Dodgers a la política
La candidatura de Garvey, impulsada por el reconocimiento de su nombre, especialmente entre los votantes mayores, añadió un giro inesperado a la carrera. La dinámica entre Schiff y la representante Katie Porter se volvió cada vez más tensa en las últimas semanas de la campaña, ya que ambos luchaban por un lugar en las elecciones generales.
El candidato novato Garvey aseguró su lugar en la boleta de otoño presentándose como un externo que compite contra los arraigados insiders de Washington, a quienes responsabiliza por el aumento de precios en alimentos y combustibles, costos inalcanzables de vivienda y una crisis de personas sin hogar sin control en las ciudades.
Debe agradecer a Schiff y a los comités de acción política superiores que, con millones de dólares en publicidad, destacaron las credenciales conservadoras de Garvey, lo que aumentó indirectamente su visibilidad entre los votantes republicanos y de tendencia conservadora.
Entra a la campaña de otoño como un candidato poco probable para ocupar el escaño.
Los republicanos regresan a la elección general
El Partido Republicano estatal ha estado en una espiral descendente durante décadas en el demócrata California, donde un candidato republicano no ha ganado una carrera al Senado desde 1988 y los demócratas registrados superan en número a los votantes republicanos en una abrumadora proporción de 2 a 1.
Los republicanos ni siquiera tuvieron un candidato en la boleta de las elecciones generales en las carreras al Senado de 2016 y 2018.
Garvey espera seguir el camino marcado por otros atletas famosos que se convirtieron en políticos, como el ex gobernador de California Arnold Schwarzenegger, un antiguo culturista y actor que fue el último republicano en ocupar el cargo más alto del estado, el representante de Utah Burgess Owens, ex jugador de la NFL, y el ex jugador de baloncesto profesional Bill Bradley, que se convirtió en un senador de larga trayectoria en Nueva Jersey.
Se autodenomina "moderado conservador" y argumenta que no debería ser encasillado en etiquetas convencionales, como el movimiento político "Make America Great Again" del expresidente Donald Trump.
Garvey ha votado dos veces por Trump, quien perdió en California de manera abrumadora pero sigue siendo popular entre los votantes republicanos, aunque ha dicho que no ha tomado una decisión sobre la contienda presidencial de este año.
Se opone personalmente a los derechos de aborto, pero no respalda una prohibición nacional del aborto y siempre "defenderá la voz del pueblo", aludiendo a la inclinación duradera del estado a favor de los derechos de aborto.
También tuvo que superar la reaparición de detalles escandalosos sobre su vida privada, incluyendo tener dos hijos con mujeres con las que no estaba casado, lo que socavó la imagen pulcra que cultivó en sus días con los Dodgers.