Una nube de polvo del Sahara llegó a Puerto Rico desde la madrugada de este domingo y pasará hasta el martes por encima de la Isla, pero a diferencia de otros fenómenos similares, esta vez es acompañada por cenizas y dióxido de azufre (SO2) del volcán Cumbre Vieja, que hizo erupción a mediados de septiembre en España.
Partículas de la erupción del volcán Cumbre Vieja, en España, llegan a Puerto Rico
Partículas provenientes de la erupción del volcán Cumbre Vieja, en España, acompañan la nube de polvo que pasa por Puerto Rico desde esta madrugada.
No obstante, el Servicio Nacional de Meteorología (SNM) en San Juan dijo que el polvo del Sahara predomina por encima de los otros dos tipos de partículas sobre Puerto Rico, según se observa en imágenes satelitales del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Miami.
“Impactará como todo lo que contamina el aire, especialmente las personas que son bien propensas a problemas respiratorios”, dijo la meteoróloga Rosimar Vázquez, del SNM en San Juan a El Nuevo Día.
La nube llegó a medianoche de este domingo, pero su zona más intensa entró después de las 4:00 AM.
“Los pronósticos del Programa de Observación de la Tierra sugieren una mejoría de la presencia de este particulado en Puerto Rico para la mañana del lunes. Se anticipa que la nube pudiera llegar a República Dominicana en la noche del domingo”, compartió la Sociedad de Astronomía del Caribe (SAC).
"Tenemos que esperar el análisis de la laminilla del Departamento de Microbiología de la Universidad de Puerto Rico, porque en la laminilla vamos a ver qué es lo que tenemos suspendido en el aire. Si hay rastro de dióxido de azufre o ceniza volcánica, eso lo va a reflejar el muestreo del aire”, agregó la meteoróloga Deborah Martorell a El Nuevo Día.
La zona más intensa de la nube dejará Puerto Rico este domingo tarde por la noche, pero sus remanentes pasarán sobre la Isla hasta el miércoles.
Por esto, el sitio web del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) recomienda tomar precauciones a niños, ancianos, personas con problemas respiratorios o cardiacos, pero no esperan mayores afectaciones a la población en general.








