Aguadilla decreta estado de emergencia ante la falta de energía eléctrica
El alcalde de Aguadilla, Julio Roldán, ha firmado una orden ejecutiva número 21 que decreta el estado de emergencia ante la falta de energía eléctrica. Esto, ante la inacción de la empresa LUMA Energy, quienes no han podido establecer un plan para estabilizar el servicio.
"Hemos decidido decretar un estado de emergencia municipal ante la cantidad de comunidades y familias que llevan días sin el servicio de energía eléctrica en nuestro pueblo”, sostuvo Roldán en comunicado de prensa.
Roldán aseguró que comunidades como Cuesta Vieja, el sector Pupo Jiménez o los Corazones tienen "demasiados días sin luz", por lo que había que tomar medidas al respecto.
El ejecutivo también dijo que se había comunicado con LUMA Energy, pero que "no entiendo cómo a estas alturas todavía no cuentan con un plan que brinde seguridad a los ciudadanos de contar con su servicio eléctrico".
De esta manera, se une a los alcaldes de Trujillo Alto o Isabela que también tuvieron que adoptar esta orden por el tiempo que su población tiene sin luz.
"LUMA Energy lleva en funciones una semana, pero vienen preparándose desde hace un año para asumir las responsabilidades del sistema eléctrico, por lo que se supone que tuvieran planes de trabajo y de acción inmediatos para resolver imprevistos como estos y no dejar a desprovistos de energía al pueblo”, añadió el alcalde de Aguadilla.
El efecto de la Orden Ejecutiva estima que ya sea bajo efecto de contrato o subasta, la administración del municipio puede intervenir para ayudar a devolver la electricidad a los habitantes. El tiempo estimado es no mayor a tres horas desde el momento que el ciudadano notifica del problema a la alcaldía.
Además, Roldán aseguró que el Código Municipal de Puerto Rico le otorga a los alcaldes la potestad de poder tomar estas acciones para restablecer el servicio de electricidad y aguas o aguas residuales si los encargados de hacerlo no ofrecen una solución al problema.
El tiempo sin electricidad en Aguadilla ya va por los 20 días, una cantidad que ha despertado el desespero en los habitantes de la localidad y que demandaban soluciones a su problemática.
