La delicadeza y belleza de una flor se refleja en nuestras madres hispanas. La intensidad de los colores nos recuerda que una madre es tierna, amorosa, decidida, valiente, desprendida y fuerte. Este año lo celebramos diferente, muchas cosas han cambiado pero el respeto y admiración por una madre prevalece.

Celebramos el Día de la Madre con flores, recordándoles que son ustedes una flor.