CONDADO DE CHESTER, Pensilvania.- En medio de la crisis migratoria que se vive en el país, dos adolescentes hispanas víctimas de trata de personas fueron rescatadas de la esclavitud a las que un hombre tenía sometidas.
Rescatan a adolescentes hispanas víctimas de trata en granja de hongos en Pensilvania
Ramiro Caal Jolmna fue detenido y acusado por los delitos contra las menores a quienes ayudó a entrar al país, pero esclavizó con el pretexto de que tenían una enorme deuda con él.

De acuerdo con la investigación realizada por la Policía Estatal de Pensilvania, Ramiro Caal Jolomna, un hombre de 36 años y residente del condado de Chester, fue acusado de traer al país a dos niñas –una mexicana y la otra guatemalteca– y con el pretexto de que tenían una “deuda” por su ingreso, las hizo trabajar jornadas de hasta 16 horas, los siete días a la semana, quedándose con todo el salario que percibían por su trabajo en una granja de hongos.
Por ello, este lunes 22 de septiembre el Fiscal General Dave Sunday y la Policía Estatal de Pensilvania anunciaron cargos contra Jolomna, quien además de obligar a las menores inmigrantes a trabajar, las amenazaba con castigarlas o deportarlas si se alejaban de él.
Ninguna de las adolescentes, de 14 y 17 años, acudía a la escuela, pues el hombre no se lo permitió, ya que debían trabajar para cubrir la deuda que tenían con él. Este tipo de trata es muy común entre migrantes que llegan a Estados Unidos con ayuda de personas o empresas que supuestamente ofrecen empleos en otros países.
Las víctimas trabajaban y realizaban labores domésticas
Desde México llegó la adolescente de 14 años, ella además de trabajar las 16 horas diarias, tenía que realizar labores domésticas en la casa de Jolomna y su esposa, a quienes les firmaba los cheques de su sueldo y no recibía nada de él.
El caso de la joven de Guatemala era similar, ella tiene 17 años y llegó a Estados Unidos en busca de empleo para poder enviar dinero a su familia, ya que su padre está enfermo.
A la menor guatemalteca se le daba un poco de su sueldo para que pudiera enviarlo a su familia, pero la mayor parte del salario se lo quedaba Jolomna.
Jolomna se presentó a sí mismo como un patrocinador de inmigración, pero lejos de ayudar a las adolescentes a conseguir un buen empleo para salir adelante, las esclavizó y se aprovechó de su vulnerabilidad.
Los patrocinadores de inmigración suelen asumir la responsabilidad financiera de los inmigrantes hasta que se naturalizan, acumulan suficientes horas de trabajo o abandonan el país, además reembolsan al gobierno estadounidense si el inmigrante necesita utilizar programas sociales.
Los cargos contra el hombre
Ramiro Caal Jolomna enfrenta cargos por delitos graves de trata de personas y servidumbre involuntaria. Permanece en la prisión del condado de Chester, sin poder pagar el 10% de la fianza de $1 millón.
Los cargos fueron el resultado de una investigación de la Policía Estatal de Pensilvania y la unidad de trata de personas de la Fiscalía General.
El Fiscal Dave Sunday calificó los detalles del caso de "perturbadores" y condenó al acusado por "abusar de niñas vulnerables que querían ganarse la vida honestamente y ayudar a sus familias en su país".
"La trata laboral, aunque no aparece tan a menudo en los titulares, es una conducta cruel y deshumanizante que obliga a las víctimas a una rutina de impotencia y silencio", finalizó Sunday.
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