El viernes 1 de marzo al mediodía, autoridades informaron que Madeline Soto, de 13 años, estaba muerta y que el principal del sospechoso en el caso era Stephan Sterns, novio de la mamá de la niña. Horas después, confirmaron el
hallazgo del cadáver de la pequeña, quien había sido reportada como desaparecida el lunes 26 de febrero.