Decenas de manifestantes se dieron cita este miércoles en Albany para exigir que no se revierta la medida que prohíbe que los jueces estatales impongan fianzas por delitos menores. Se estima que más de 20,000 personas podrían beneficiarse anualmente con esta iniciativa que permite que el acusado permanezca en libertad hasta que tenga su cita en corte.