BROOKLYN, NY.- El líder de una iglesia católica de Nueva York fue relevado de sus funciones administrativas tras una investigación que reveló graves violaciones de las políticas financieras de la diócesis, anunciaron las autoridades eclesiásticas el lunes.
Destituyen a sacerdote católico que permitió grabación de video provocativo de Sabrina Carpenter en iglesia de Brooklyn
Un video musical provocativo desata una investigación que revela transferencias millonarias no autorizadas y gastos personales con fondos de la iglesia. ¿Qué más oculta esta parroquia de Brooklyn?


La investigación se inició después de que Gigantiello aprobara la filmación de un video musical con escenas provocativas de la cantante pop Sabrina Carpenter en la iglesia, lo que generó controversia en noviembre pasado.
Monseñor Jamie Gigantiello, párroco de la iglesia Nuestra Señora del Monte Carmelo en Brooklyn, fue despojado de "cualquier función de supervisión pastoral o gobierno" por el obispo Robert Brennan de la Diócesis Católica Romana de Brooklyn.
Los señalamientos contra el sacerdote
Según el comunicado del obispo Brennan, la investigación descubrió evidencia de transferencias financieras no autorizadas y uso indebido de fondos de la iglesia. Entre los hallazgos se encuentran:
- Transferencias de 1,9 millones de dólares en fondos parroquiales a cuentas bancarias afiliadas a Frank Carone, ex jefe de gabinete del alcalde de Nueva York, Eric Adams.
- Uso de una tarjeta de crédito de la iglesia para gastos personales "sustanciales".
- Violaciones de las políticas y protocolos de inversión de la diócesis.
¿Quién releva al párroco de la iglesia Nuestra Señora del Monte Carmelo en Brooklyn?
El obispo Brennan designó al obispo Witold Mroziewski como administrador de la parroquia. Gigantiello también fue relevado de sus funciones como vicario de desarrollo de la diócesis.
La diócesis afirmó estar cooperando plenamente con las investigaciones de las autoridades. Gigantiello no ha respondido a las solicitudes de comentarios sobre estas acusaciones.
Este caso se suma a una investigación federal en curso sobre posibles tratos financieros entre Gigantiello y Carone, aunque ninguno ha sido acusado de delitos hasta el momento.


















